En los últimos días, fuertes lluvias e inundaciones han causado estragos en varias zonas de California, dejando autos enterrados bajo lodo, carreteras colapsadas y daños generalizados en la infraestructura y la vida cotidiana de los residentes. Estas precipitaciones intensas, asociadas a un sistema atmosférico cargado de humedad que ha afectado el sur del estado, han provocado inundaciones repentinas, deslizamientos de tierra y cortes de carreteras principales, obligando a las autoridades a emitir advertencias de evacuación y a trabajar en operaciones de rescate para sacar a personas atrapadas en sus vehículos o viviendas.

En localidades como Wrightwood, al noreste de Los Ángeles, las lluvias persistentes convirtieron las calles en ríos de barro y escombros, lo que llevó a que varios coches quedaran sepultados hasta las ventanas por el lodo y las piedras arrastradas por las corrientes. Los equipos de emergencia han tenido que responder a decenas de llamadas para liberar carreteras y rescatar a conductores y residentes que quedaron aislados. En algunas comunidades, los vehículos fueron literalmente cubiertos por capas de sedimentos, mientras que tramos de carretera quedaron cerrados por el colapso del pavimento o por la acumulación de escombros que imposibilitó el tránsito normal.

El impacto del temporal ha sido igualmente visible en las principales rutas de transporte. Varias carreteras quedaron inundadas o bloqueadas, y las autoridades recomendaron a los conductores evitar viajar cuando las condiciones eran más peligrosas, debido al riesgo de quedar atrapados en secciones anegadas o en tramos donde el lodo había arrastrado la superficie. En algunos casos, tramos enteros de asfalto quedaron dañados o inutilizables, obligando a redirigir el tráfico y a llevar a cabo trabajos de reparación que podrían tardar días o semanas.

Además de los daños materiales, estas lluvias intensas han generado servicios interrumpidos y desafíos logísticos, con zonas bajo aviso de evacuación y miles de personas enfrentando la limpieza y recuperación tras el paso del temporal. Las autoridades meteorológicas han señalado que, aunque el pico de las lluvias ha pasado, el riesgo de inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra continúa en algunas áreas, especialmente en terrenos ya saturados y cerca de laderas inestables.

Estos fenómenos meteorológicos extremos subrayan la vulnerabilidad de infraestructuras frente a precipitaciones extraordinarias y la importancia de las alertas tempranas y la respuesta coordinada entre agencias para proteger vidas y propiedades en California.

Fuentes: The Guardian, Univisión Noticias y Associated Press

Recomendado para ti