Marta León, la cubana que fue abandonada por su propio hijo en la selva del Darién, en Panamá, llegó a Brasil, donde la esperaba su otra hija.

Fue la joven la que confirmó la noticia del reencuentro a través de las redes sociales y agradeció a las personas que hicieron posible el viaje de Marta.

“Agradecida estoy de todos, gracias por su preocupación, apoyo y bendiciones. Ya mi mamá está con nosotros, hay mucho por hacer para recuperar su salud. Muchas gracias”, escribió la cubana Yudith Rejas León en Facebook.

Semanas atrás, Rejas León dijo que su hermano “dejó tirada” a su madre en la peligrosa travesía.

La cubana residente en Brasil comentó que su hermano le mintió a toda la familia informando que su madre había muerto y que la había enterrado.

La mujer recordó que lloró a su madre y le hizo misa, mientras la señora estaba abandonada en la vera de un río, donde fue ayudada por un venezolano que le dio primeros auxilios y un coyote que se puso en contacto con ella para enviarle el video de su mamá.

“Mi hermano me había hecho creer que estaba muerta y fue mentira. Mi mamá lo que estaba era herida y él supuestamente había salido a buscar ayuda y nunca regresó. Ella tenía una pierna fracturada y ahí la dejó tirada en el río allí, a punto de que creciera el río y se pudiera ahogar. Y ella esperando que él regresara y nunca regresó, me la dejó abandonada”, explicó.

La mujer también señaló que su madre recibió luego atención médica en Metetí, una localidad panameña de la provincia de Darién, donde le curaron las lesiones.

Lázaro, el migrante cubano que dejó a su madre abandonada en la selva del Darién, se defendió de las acusaciones de miles de cubanos en redes sociales y aseguró que él nunca la abandonó.

“Yo pasé por un barranco porque cogí por el camino equivocado y ahí es cuando se me cae”, dijo Lázaro. “Cuando llego abajo mi mamá estaba inconsciente, para mi estaba muerta y hecha caca. Para mí esos son los efectos de muerte y lo que hice fue dejarla al lado del río”, agregó el hombre.

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