El Parlamento cubano aprobó este jueves la polémica Ley de Comunicación Social durante la segunda sesión extraordinaria de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP) que se desarrolla en el Palacio de Convenciones de La Habana.

Con esta nueva ley el régimen regula los contenidos de los medios de prensa del país y no reconoce a los medios independientes como figura jurídica.

La normativa tiene como objeto "regular el Sistema de Comunicación Social para la gestión estratégica e integrada de los procesos de comunicación social en los ámbitos organizacional, mediático y comunitario, con fines políticos, de bien público, organizacionales y comerciales, tanto en los espacios públicos físicos como en los digitales", destaca Cubadebate.

El reporte indica que la idea es "establecer los principios de organización y funcionamiento para todos los medios de comunicación social en el país". 

El mandatario cubano, Miguel Díaz-Canel, calificó la ley como un "primer paso" para controlar el sistema de comunicación del país y aclaró que "la redacción de los artículos de esta ley tiene un enfoque necesariamente regulatorio". 

“Su mayor valor radica en el reconocimiento de las potencialidades y beneficios de la Comunicación Social para el desarrollo del país”, comentó.

"El largo período de confrontación y la agresividad que caracteriza la criminal política del gobierno estadounidense impacta en todos los ámbitos de la sociedad cubana y, de manera particular, en lo comunicacional”, agregó.

La ley, dijo, "debe convertirse en un instrumento de trabajo permanente para entender que el fin no es el mensaje, sino la utilidad imprescindible de la gestión comunicacional en función de los objetivos estratégicos" y añadió "que esta legislación debe permitirnos superar los vacíos y vencer las inercias institucionales que inciden negativamente en los servidores públicos responsables de informar a la población. Alertó que le toca a la prensa informar a la población responsablemente".

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