La Giraldilla llora a un país desgarrado por la corrupción y exige libertad(video)
Redacción de CubitaNOW ~ lunes 17 de noviembre de 2025
Desde las alturas del Castillo de la Real Fuerza, la Giraldilla observa un país que llora, un pueblo que sufre y unas calles que se deshacen bajo el peso de la corrupción y la negligencia. Símbolo de resistencia y vigilancia eterna, su bronce ha presenciado siglos de historias heroicas, piraterías, esclavitudes y revoluciones, pero nada se compara al saqueo sistemático que hoy devora a Cuba.
Se ha ido otro aniversario de La Habana Vieja que, bajo la severa vista de la historia, se desploma como testigo mudo de la decadencia. El Capitolio, otrora joya arquitectónica, yace rajado, reflejo de promesas incumplidas y proyectos destruidos.
Niños escuálidos buscan sustento en la basura, mientras madres agotadas sollozan por un futuro robado y hombres, quebrantados por falsas esperanzas, se resignan ante un sistema que reproduce miseria con manos de hierro.
La represión se siente en cada esquina, una serpiente venenosa que lanza balas y gases sobre plazas donde la sangre del pueblo fluye. El Malecón arrastra sueños y la emigración masiva deja pueblos fantasmas bajo la mirada silenciosa de monumentos a Martí, profanados por la hipocresía de quienes gobiernan.
Los campos de caña yacen yermos, reviviendo esclavitudes modernas y salarios evaporados, mientras la corrupción corroe todo como gangrena imparable.
Gobernantes... ¡esta es una llamada de atención! miren la Isla no como un botín, sino como una madre ultrajada por su avaricia y autoritarismo. Sus manos, manchadas de decretos represivos, podrían sanar, pero eligen estrangular. El mar ruge, y en su rumor late el cambio que no pueden silenciar. La historia juzgará a quienes pisotean a su pueblo y no habrá monumento ni decreto que los salve de la memoria colectiva.
Pero en esta oscuridad, la esperanza se niega a morir. Late en los ojos valientes, en los susurros de libertad que el viento transporta, y en cada acto de resistencia que desafía el miedo. Cuba renacerá, transformando cadenas en ríos de luz y lamentos en himnos de victoria.
Bailaremos bajo cielos limpios, celebrando la libertad conquistada con el son de nuestra música, porque cada grieta de dolor se convierte en semilla de resistencia. La Giraldilla sigue vigilante, y su mensaje es claro: la isla no será doblegada; la libertad es inevitable.
Del perfil de Lara Crofs