El cuerpo de Yarlenis Ortiz González, una migrante cubana víctima de feminicidio en Tapachula, México, aún no ha sido repatriado a Cuba debido a la solicitud de autoridades mexicanas que exigen 7.500 dólares para cubrir los costos del traslado.

Mirelsi Palmero, amiga cercana de la fallecida, informó al influencer cubano Niover Licea que las autoridades mexicanas no permiten la incineración del cuerpo debido a la naturaleza del crimen.

La madre de la joven, Iralda González, recurrió a las redes sociales solicitando apoyo financiero para reunir el monto necesario y poder darle un sepelio digno en su tierra natal, rodeada de sus seres queridos.

El Código Nacional de Procedimientos Penales en México prohíbe la cremación de cuerpos que han sufrido muertes violentas, incluyendo casos de feminicidio, homicidio doloso, accidente o suicidio, según el artículo 271.

Yarlenis Ortiz González, de 37 años, salió de Cuba dejando a dos hijos adolescentes. Trabajaba en el bar Las Caguameras en la colonia Las Hortencias. Fue atacada por su expareja, Iván Cabrera Martínez, con un arma blanca en el mismo lugar donde trabajaba. A pesar de los intentos de ayuda, la joven llegó sin signos vitales al recibir asistencia médica.

La Fiscalía de Chiapas informó que el proceso contra Cabrera Martínez continúa abierto y su defensa tiene un mes para presentar pruebas a su favor. Según el Código Penal de Chiapas, el delito de feminicidio conlleva una condena de 40 a 60 años de prisión, además de sanciones económicas.

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