La popular influencer cubana conocida como La Cintumbare vuelve a encender las redes con una serie de declaraciones que no pasaron desapercibidas. En esta ocasión, el blanco de su ironía fueron las mujeres que, según ella, terminan mostrando interés en sus exparejas. Con su característico estilo desinhibido y entre carcajadas, la creadora de contenido envió un mensaje que fue a la vez una burla y una afirmación de seguridad en sí misma: “Pueden estar muy feos, les puede faltar un ojo, les puede faltar un brazo, les puede faltar un pie, pero si estuvo conmigo, ese es el que les gusta a ellas”.

"Oye, ¿no será que la que les gusta a ustedes soy yo?". Esta frase, dicha con tono burlón mientras se encontraba en bata y desde la comodidad de su cama, desató una ola de reacciones en redes. Para muchos usuarios, su comentario refleja una mezcla entre autoestima y provocación. Para otros, fue simplemente otra muestra de su habitual sarcasmo con el que aborda temas personales y polémicos. La Cintumbare no solo bromeó sobre su historial amoroso, sino que también insinuó que, más allá del interés por sus ex, lo que realmente provoca curiosidad entre otras mujeres es su propia figura. “¡Cómo les gusta la lechonga mía!”, soltó, desatando risas y controversia.

Sus palabras reafirman el tipo de personaje que ha construido en el espacio digital: una mujer sin filtros, que se ríe de sí misma y de los demás, y que no teme a la crítica pública. Desde hace tiempo, La Cintumbare ha ganado notoriedad por su estilo atrevido y por tocar temas personales de manera directa, lo que le ha valido tanto seguidores fieles como detractores implacables.

"La que se repite en sus ex es usted, no yo", escribía una seguidora en tono irónico, reflejando la división entre quienes disfrutan del humor de la influencer y quienes creen que su actitud perpetúa rivalidades innecesarias entre mujeres. Sin embargo, para La Cintumbare, estas críticas parecen no tener mayor peso. En varias ocasiones ha asegurado que lo que digan de ella en redes no le afecta y que prefiere reírse antes que tomarse los comentarios a pecho.

Desde su deportación a Cuba, La Cintumbare ha seguido generando contenido polémico. Su retorno a la isla, que muchos consideraron un castigo, ha sido, según sus palabras, “una bendición”. Y, en efecto, no ha dejado de producir material viral, ni de ofrecer opiniones candentes sobre todo lo que gira en torno a su figura pública.

Con cada video o publicación, reafirma su dominio del espectáculo digital y su habilidad para mantenerse en el centro de la conversación. Irónica, provocadora y divertida, La Cintumbare sigue desafiando las expectativas de lo que una influencer puede o debe ser.

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