Un ciudadano estadounidense de 28 años, Rasheedul Mowla, se declaró culpable en un tribunal federal de Brooklyn de intentar proporcionar apoyo material al grupo terrorista Estado Islámico (ISIS). El joven, originario de Nueva York, enfrenta ahora una posible condena de hasta 20 años de prisión.

Según documentos judiciales y declaraciones oficiales, Mowla viajó a Arabia Saudita en junio de 2017, supuestamente con la intención de participar en una festividad religiosa. Sin embargo, las autoridades determinaron que su verdadero objetivo era llegar a Siria para unirse a ISIS. Fue detenido antes de cruzar la frontera y deportado a Estados Unidos el 29 de agosto de ese mismo año.

“Mowla no sólo planeaba unirse a ISIS; estaba preparado para matar y morir por ellos”, afirmó Jessica Tisch, comisionada del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD). “Este tipo de amenaza requiere una acción inmediata. Gracias al trabajo coordinado del NYPD y las agencias federales, se evitó una tragedia antes de que alguien resultara herido”.

La declaración de culpabilidad fue anunciada por Tisch junto con John J. Durham, fiscal federal del Distrito Este de Nueva York así como otros oficiales de la División de Seguridad Nacional del Departamento de Justicia y el FBI en Nueva York.

“Mowla intentó unirse a una organización terrorista que ha llevado a cabo brutales atentados en todo el mundo, cobrando la vida de miles de inocentes, incluidos ciudadanos estadounidenses”, explicó Durham. “Gracias a la labor diligente de nuestras fuerzas del orden, su plan fue frustrado y hoy rendirá cuentas ante la justicia”.

Durante los interrogatorios, Mowla admitió que era consciente de que ISIS era una organización terrorista. Reconoció que, de haber alcanzado su destino, habría tomado las armas y estaba dispuesto a morir por la causa del grupo extremista.

Este caso se suma a una serie de acciones recientes contra personas con presuntos vínculos con grupos terroristas. En febrero, Mansuri Manuchekhri, residente de Brooklyn y originario de Tayikistán, fue arrestado por conspirar para apoyar a ISIS y su rama en Asia Central, transfiriendo $70,000 a sus simpatizantes.

Asimismo, en junio de 2024, ocho inmigrantes fueron arrestados en operativos coordinados en Nueva York, Filadelfia y Los Ángeles por presuntos vínculos con ISIS.

“Casos como este demuestran nuestro compromiso constante para interceptar cualquier intento de apoyar el terrorismo y garantizar la seguridad de nuestra nación”, aseguró Raia, del FBI.

El Departamento de Justicia continúa reforzando la cooperación entre agencias locales, estatales y federales para prevenir amenazas internas relacionadas con el extremismo violento.

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