Los torrenciales aguaceros que cayeron sobre parte de la ciudad de La Habana la tarde de este lunes provocaron severas inundaciones en la Avenida Buenos Aires del municipio Cerro. Muchas de las viviendas están completamente llenas de agua y el tránsito se dificulta empeorando la situación.

El agua cubre algunos bancos del parque y la parada de ómnibus que está en esa área. En la calle Caridad entre Colón y Maceo hay grandes inundaciones; los vecinos ya no saben qué hacer pues el gobernador de la ciudad dice que no tiene los recursos para solucionarlo, cómo dragar y descongestionar los tragantes y tuberías.

Cuba soporta una crisis desde 1991 con una recaída a partir de 2016, en este sensible aspecto de las inundaciones que dañan hogares. Según los datos oficiales del gobierno esto se ha recrudecido desde 2016 aunque la verdad es que la crisis comenzó el primero de enero de 1959.

Esta situación se multiplica en todo el país, recrudecida poe las migraciones internas, de los campos hacia las ciudades y de la región del Oriente hacia las del Centro y el Occidente que reconfiguran los bordes sobre todo de las grandes urbes. Al aumentar la densidad poblacional y mantener la misma estructura de los años 60, no hay respuesta válida para solucionar la crisis.

Para poner otro ejemplo, solo en la ciudad de Santiago de Cuba, en 2013 se registraron 42 asentamientos precarios, que emergieron dentro de la urbe o su periferia y todas esas casas o "llega y pon" carecen de desagües.

Hay lugares donde colindan barrios estructurados con aquellos espontáneos, legales con ilegales y viviendas precarias con otras confortables y en general, todos cargan con desventajas en el acceso a los servicios básicos, como son agua luz eléctrica y el sistema de alcantarillado.

A la espera de fondos, antes había una estrategia o al menos eso decían las autoridades; hoy te dicen: "No tenemos los recursos". La población cubana ha resistido 65 años ¿habrá que esperar otros 65 para que no se inunden calles y hogares? ¿O será mejor pensar en que "no hay mal que dure 100 años ni cuerpo que lo resista"... aunque en este caso ya vamos por ¡¡¡65!!!.

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