En el Reparto La Mosca, Camagüey, se vivió una situación que refleja la impunidad y el abuso que muchas veces ejercen algunos funcionarios sobre los ciudadanos. Según denunció el periodista Jose Luis Tan Estrada, un inspector de la Empresa Eléctrica, identificado como Guillermo, se presentó en su vivienda para cortar la electricidad bajo el argumento de una supuesta deuda de apenas 25 pesos, con un retraso de 15 días, sin siquiera mostrar pruebas de tal adeudo.

Lo alarmante no fue solo el corte de luz, sino la forma en que se ejecutó. El inspector llegó con maltrato verbal y una prepotencia inaceptable hacia su madre, quien aún se recupera de las secuelas de un virus y estaba cuidando a su hermanito enfermo con fiebre.

La mujer intentó explicar la situación con calma, señalando que los pagos de la electricidad no tienen un día fijo y que, en caso de existir demora, podrían darle la oportunidad de regularizar la cuenta más tarde.

La respuesta fue brutal: el funcionario afirmó que “no estaba para leer corrientes”, que no tenía un aparato digital para verificar nada y que solo estaba allí para cortar la electricidad. Su actitud, según describe la denuncia, fue de confrontación y humillación, como si tratara con una delincuente, ignorando por completo el estado vulnerable de la familia.

A pesar de que la corriente fue pagada horas después, nadie acudió a restablecer el servicio, evidenciando la negligencia y desprecio de la empresa hacia los ciudadanos. Lo más grave es que esta no es la primera vez que el mismo inspector actúa de manera abusiva en ese hogar, lo que genera una sensación de inseguridad y miedo frente a la arbitrariedad de ciertos funcionarios.

Los comentarios de usuarios de redes reflejan la indignación colectiva: señalan la impunidad, la deshumanización de quienes deberían servir a la comunidad y la impotencia que sienten los ciudadanos frente a estas situaciones.

La denuncia de Tan Estrada no solo es un reclamo por el corte de electricidad, sino un llamado a visibilizar cómo las familias más vulnerables en Cuba enfrentan abusos que afectan su salud y bienestar.

Jose Luis hace responsable a la Empresa Eléctrica de cualquier daño que pueda sufrir su madre o su hermanito y advierte que este tipo de abuso no puede quedar impune. La historia evidencia la urgencia de exigir transparencia, respeto y humanidad en la gestión de los servicios públicos, recordando que detrás de cada número de cuenta hay personas con vidas, familias y derechos que deben ser protegidos.

Del perfil de José Luis Tan

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