Un joven médico de Pinar del Río se ha ganado el corazón de toda Cuba tras protagonizar un acto de valentía digno de película. Su nombre es Yaismel Corrada Valdés, tiene solo 28 años y se convirtió en héroe luego de lanzarse al mar para salvar la vida de un pescador atacado por un tiburón en aguas cercanas a La Coloma, en el extremo occidental del país.

Según reportó el diario El Guerrillero, el médico se encontraba en la Cadeca de Cortés, Sandino, cuando recibió una llamada desesperada de la Unidad de Guardafronteras: un hombre estaba gravemente herido mar adentro y necesitaba ayuda médica urgente. Sin dudar un segundo, Yaismel recogió lo necesario en la posta médica y se embarcó rumbo a altamar, sin saber exactamente lo que le esperaba.

“Decidí ir a auxiliar a esa persona porque sabía que podía ayudarlo. Si lo tengo que hacer otra vez, lo haría sin pensarlo”, declaró el joven galeno, especialista de Primer Grado en Medicina General Integral y diplomado en Emergencias y Urgencias Médicas.

El pescador herido fue identificado como Yordán Rivera, de la comunidad de Galafre Nuevo. Había sufrido graves lesiones en una mano y cortes en el pecho, producto del ataque del tiburón. La búsqueda fue tensa y prolongada, pero finalmente la lancha médica logró ubicarlo, más cerca de La Coloma que de Cortés.

“Lo subimos a la lancha, revisé signos vitales, vendé las heridas y canalicé una vena para hidratarlo con cloruro de sodio”, relató Corrada. Su rápida intervención permitió estabilizar al herido y mantenerlo con vida hasta llegar al puerto, donde un equipo del SIUM lo esperaba para trasladarlo de inmediato al hospital "Abel Santamaría", en la capital provincial. Allí fue operado de urgencia y, según las autoridades médicas, se encuentra en plena recuperación.

El gesto de Yaismel ha sido aplaudido en redes sociales, donde muchos lo llaman “el héroe de Sandino”. Su historia recuerda que, incluso en tiempos difíciles, la vocación y el amor por la vida pueden más que el miedo o el peligro.

“Fue una experiencia única. Me hizo entender hasta dónde soy capaz de llegar por salvar a alguien”, confesó el joven médico.

En Cuba, los ataques de tiburones son extremadamente raros —solo 44 documentados en más de dos siglos—, pero este hecho demuestra que la solidaridad y el coraje sí abundan en la Isla.

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