La comunidad de Guantánamo continúa impactada por el asesinato de Eraine Zayas Mulgado, cuyo cuerpo sin vida fue hallado la noche del 10 de diciembre frente a su vivienda, ubicada en la intersección de 12 Sur y 5 Oeste. El crimen provocó una rápida reacción en redes sociales, donde vecinos y usuarios expresaron consternación y exigieron esclarecimiento de los hechos.

De acuerdo con informaciones atribuidas a fuentes cercanas a la familia y al proceso investigativo, Ramón Velázquez Acosta habría sido detenido como presunto autor del homicidio. Las primeras indagaciones apuntan a que el móvil del crimen estaría relacionado con conflictos personales previos entre la víctima y el acusado, surgidos a partir de desacuerdos económicos y situaciones de chantaje, que habrían escalado hasta derivar en un acto de venganza.

Según los antecedentes conocidos hasta el momento, Zayas Mulgado y Velázquez Acosta mantenían una relación previa de confianza, la cual se fue deteriorando con el tiempo debido a disputas de carácter material y tensiones de tipo emocional. Estas diferencias, de acuerdo con la reconstrucción preliminar de los hechos, habrían creado un escenario de confrontación que terminó de forma violenta.

El hallazgo del cuerpo frente a la vivienda de la víctima generó un fuerte impacto en el vecindario, no solo por la cercanía del hecho con el entorno familiar, sino también por la creciente percepción de inseguridad que se vive en distintas zonas del país. En los últimos meses, hechos violentos como este han alimentado la preocupación ciudadana y el debate sobre el aumento de la delincuencia en Cuba.

El caso se encuentra actualmente en fase de investigación penal, y las autoridades han indicado que el proceso seguirá su curso conforme a lo establecido por la ley. Ramón Velázquez Acosta enfrenta cargos por el delito de asesinato, por lo que deberá responder ante los tribunales competentes, donde se determinará su responsabilidad en los hechos.

Ante la proliferación de versiones no confirmadas y especulaciones en redes sociales, se ha hecho un llamado a la prudencia y la responsabilidad informativa, especialmente para evitar afectar a las familias involucradas o entorpecer el desarrollo del proceso judicial. Allegados a la víctima han pedido respeto y discreción mientras se esclarecen completamente las circunstancias del crimen.

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