Icónico restaurante La Carreta reabre en manos privadas tras siete años en decadencia
Redacción de CubitaNOW ~ lunes 18 de septiembre de 2023
El icónico restaurante La Carreta ha reabierto sus puertas en manos privadas después de siete años en decadencia.
Fue en junio pasado cuando La Carreta, ubicada en la esquina de las calles 21 y K, en el corazón de El Vedado habanero, volvió a prestar servicio tras ser restaurada.
Cubanos entrevistados por 14ymedio aseguran que el sitio no solo luce mejor, sino que da gusto visitarlo.
"Tendrá el mismo nombre, pero será privado", dijo uno antes de la reapertura. "Era una maravilla nada más entrar. El clima, el olor, la atención", dijo al mencionado diario Ariel, cliente habitual de La Carreta desde su renovación.
"No parecía Cuba", añadió junto a su novia Martha. "Y ha tenido muchísimo éxito. Al principio estaba vacío, pero ahora es cada vez más difícil conseguir mesa, ¡siempre está lleno!", refirió.
Según indican, el dueño del local es el cubano Obel Martínez, “quien regenta también el bar Mojito Mojito, en la Plaza Vieja, el centro histórico de la capital”.
"Es un hombre muy correcto", apuntó Ariel. "Una vez oí cómo les decía a los empleados que al cliente hay que tratarlo bien, que si viene mal vestido por ejemplo no se le puede decir que está mal vestido, que hay que hacerlo de otra manera, dejarle que entre para que vea el lugar. Vaya, lo que tendría que ser normal y en este país no lo es".
"Es verdad que los precios no están al alcance de cualquiera, pero las cantidades son bien abundantes", apuntó Martha quien mencionó el "picando con guajiros", que lleva croquetas, tostones rellenos, fritura de malanga, chicharrones, casabe y trocitos de tamal, por 1.200 pesos.
"Ya con eso y con unos jugos, uno se llena", agregó Ariel. "Y los postres son una maravilla".
La pareja recordó que Obel Martínez les dijo una vez que su intención no era hacer "cocina gourmet" y porciones pequeñas, "que los cubanos somos de comer bien".
"No podemos decir nada malo. Ojalá todas las paladares fueran así y no te trataran como si te estuvieran haciendo un favor", finalizó la pareja que anhela más sitios como este en el país.