Huracán Melissa se aleja de Cuba tras dejar destrucción, apagones y caos en el oriente del país
Redacción de CubitaNOW ~ miércoles 29 de octubre de 2025
El huracán Melissa continúa golpeando con fuerza el oriente de Cuba, dejando tras de sí un panorama de devastación, apagones masivos y comunidades aisladas. Según el más reciente informe del Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos, el fenómeno se prepara para abandonar territorio cubano por la costa nororiental y avanzar hacia las Bahamas, manteniendo aún una alta intensidad.
A las 8:00 de la mañana (hora de Miami), el ojo del huracán se encontraba en 20.6°N y 75.7°O, a unos 70 kilómetros al noroeste de Guantánamo y 335 kilómetros al sur de las Bahamas centrales, con vientos máximos sostenidos de 165 km/h y rachas superiores. Se desplaza hacia el norte-noreste a unos 22 km/h, con una presión central de 968 milibares, según el boletín intermedio número 32A.
Los modelos meteorológicos indican que Melissa saldrá al mar entre la mañana y primeras horas de la tarde por el norte de Holguín, para luego continuar sobre las Bahamas sudorientales y aproximarse a Bermudas entre la noche del jueves y la madrugada del viernes.
Aunque el ciclón ya no conserva la fuerza destructiva con que tocó tierra —cuando era un huracán categoría 3—, sigue siendo una amenaza severa. Su campo de vientos huracanados se extiende unos 45 kilómetros alrededor del centro, mientras que los vientos de tormenta tropical alcanzan hasta 295 kilómetros del ojo.
El NHC advirtió que el sistema continuará provocando lluvias torrenciales y marejadas peligrosas, sobre todo en zonas montañosas y costeras del oriente cubano. En Santiago de Cuba, las precipitaciones acumuladas desde el martes superan los 250 milímetros, y en la Sierra Maestra ya se reportan más de 300 milímetros. En Holguín y Guantánamo, las lluvias podrían alcanzar hasta 500 milímetros antes de que el sistema se aleje por completo.
Estas cifras, sumadas al deterioro de la infraestructura y la falta de recursos materiales, han generado inundaciones, derrumbes y cortes de comunicación en múltiples comunidades. Las imágenes que circulan en redes sociales muestran calles convertidas en ríos, viviendas colapsadas y familias intentando protegerse con medios precarios, mientras los medios oficiales mantienen un tono triunfalista y evitan ofrecer cifras concretas sobre los daños.
El NHC mantiene avisos de huracán para Granma, Santiago de Cuba, Guantánamo, Holguín y Las Tunas, así como para el sureste y centro de las Bahamas. Además, se conservan alertas de tormenta tropical para Camagüey, Haití y las Islas Turcas y Caicos.
Mientras tanto, en el terreno, la Defensa Civil intenta responder ante una crisis agravada por la falta de recursos, energía eléctrica y combustible. Miles de personas permanecen sin electricidad ni abastecimiento básico, enfrentando el temporal sin respaldo estatal efectivo.
En medio del caos, los cubanos del oriente resisten una vez más con lo poco que tienen: techos improvisados, alimentos racionados y una incertidumbre creciente. Como repiten muchos en redes, “el miedo no es solo al viento, sino a la indolencia de un gobierno que los deja solos”.