En medio de la emergencia eléctrica que sacude a Cuba, el grupo hotelero Gaviota, perteneciente al Grupo de Administración Empresarial S.A. (GAESA) bajo control de la cúpula del régimen cubano, celebró por todo lo alto un importante evento turístico en Holguín. Con la presencia del ministro de Turismo, Juan Carlos García Granda y el presidente del Grupo de Turismo Gaviota, Carlos M. Latuff Carmenate, un día antes del "gran apagón" quedó inaugurado ‘Destinos Gaviota 2024’, la sexta edición de la Bolsa Turística que organiza el grupo hotelero gestionado por las fuerzas armadas del régimen cubano.

No se pierdan los slogan publicitarios en medio de la hambruna de un pueblo apagado: “¡Ya comenzó la VI Bolsa Turística ‘Destinos Gaviota 2024’, el evento más esperado por todos, en esta ocasión desde la oriental provincia Holguín! Hoy comenzamos una emocionante aventura donde la pasión por los viajes de naturaleza y el descubrimiento se unen. Estamos listos para conectar con viajeros, profesionales y amantes de la aventura. Sean todos bienvenidos, gracias por ser parte de esta experiencia única”, anunció en sus redes sociales el grupo hotelero.

En palabras de García Granda “Gaviota tiene la intención de mostrar a los participantes las bellezas del destino y del polo turístico que comienza a desarrollarse en Ramón de Antilla”. Lo que no dijeron fue el desalojo que sufrieron en 2021 los residentes de ese poblado costero por la construcción del polo turístico. 

“Hoy lanzamos algo más especial, el nuevo Hotel Playa Luxury en Cayo Guillermo. Este será un referente en el Caribe. Estoy seguro que, cuando crucen las puertas del Playa Luxury sentirán que han llegado a un lugar donde el lujo y el alma cubana se encuentran”, dijo Latuff Carmenate en un discurso pronunciado en el evento.

La VI Bolsa Turística ‘Destinos Gaviota 2024’, que debía sesionar hasta mañana (parece que no contaban con Óscar como invitado especial), reunió a turoperadores, agentes de viaje, aerolíneas, prensa extranjera y a otros invitados en medio de la más aguda crisis de la historia del sistema electroenergético nacional (SEN).

Para la Agencia de Viajes San Cristóbal, lo más importante fue que el evento “es el segundo de mayor importancia para el turismo en Cuba"; para nada importa que el país estuviera prácticamente paralizado, sin transporte, con la mayoría de los trabajadores en casa, los estudiantes sin asistir a clases y los cubanos sobreviviendo a jornadas de apagones infernales. Así y todo, el régimen cubano no escatimó recursos para celebrar el ‘Destinos Gaviota 2024’ y mostrar a los invitados las nuevas instalaciones hoteleras construidas en Ramón de Antilla.

Mientras el gobernante Miguel Díaz-Canel elude su responsabilidad y culpa al embargo estadounidense del colapso del SEN, deteriorado por falta de inversiones; GAESA –la empresa que controla más del 70% de la economía dolarizada del país sin fiscalización alguna- continúa con su desenfrenada carrera de inversiones en el sector turístico.

No importa que las estadísticas demuestren la caída de este sector desde 2020, con menos viajeros y ocupación hotelera que nunca: la cúpula del régimen cubano sigue invirtiendo un dinero y unos recursos que no se saben de dónde salen en construir hoteles e infraestructuras para el turismo.

Como dato dicional a esta ignominia, en 2021, el comandante Ramiro Valdés revelaba que Cuba necesitaba 250 millones de dólares anuales para mantener su matriz energética y ¿cuántos invierten en hoteles despoblados que solo dan pérdidas?

La respuesta está aquí: ese mismo año, el régimen destinaba 4 mil 138 millones de dólares en activos inmobiliarios, algunos de ellos instalaciones de lujo levantadas en La Habana, Varadero y Holguín, provincia donde, en octubre de 2021, GAESA procedía con el desalojo de familias en el poblado costero Ramón de Antilla, ese enclave que dejó de pertenecer a los cubanos para pasar a manos de las familias mafiosas de la dictadura.

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