Un grupo de aproximadamente 40 migrantes, en su mayoría ciudadanos cubanos junto a personas procedentes de Honduras y Ecuador, continúa desaparecido desde hace más de un año en el estado de Chiapas, México. Las familias han reiterado sus llamados públicos para que las autoridades mexicanas aceleren las investigaciones y establezcan acciones que permitan esclarecer el paradero de sus seres queridos. La ausencia de resultados concretos ha incrementado la preocupación de los allegados, quienes aseguran haber recurrido a múltiples vías de solicitud de ayuda.

Según reportes de la prensa azteca, los familiares han enviado videos y comunicaciones dirigidas a distintas instancias gubernamentales, indicando que las reuniones formales sostenidas con funcionarios no han derivado en información verificable sobre lo sucedido. La última señal conocida de varios de los migrantes se registró el 21 de diciembre de 2024, cuando se comunicaron desde la zona costera de San José El Hueyate. En aquel momento avisaron que serían trasladados hacia el estado de Oaxaca por vía marítima. Después de esos mensajes, los teléfonos dejaron de emitir señal.

Entre los desaparecidos se encuentran mujeres jóvenes, hombres adultos y menores de edad. Algunos buscaban continuar su trayecto hacia Estados Unidos mediante solicitudes legales, mientras que otros pretendían establecerse en México en busca de estabilidad económica. Las fichas de búsqueda emitidas semanas después de los hechos no aportaron datos concluyentes sobre el lugar donde podrían encontrarse.

Información recopilada por medios internacionales señala que el grupo había permanecido en bodegas cercanas a San José El Hueyate antes de abordar pequeñas embarcaciones. Durante esos días, varios migrantes enviaron mensajes a sus familiares expresando preocupación por situaciones de riesgo en el área. Horas antes de perderse el contacto, indicaron que estaban utilizando chalecos salvavidas y que se encontraban ya en el mar.

Las familias han denunciado, además, haber sido blanco de intentos de fraude y extorsión, ya que algunas recibieron llamadas y mensajes en los que se exigían pagos elevados a cambio de supuesta información sobre los desaparecidos, sin aportar pruebas de vida. Pese a que los familiares aseguran haber compartido datos del trayecto, nombres de conductores y rutas utilizadas, no se ha informado sobre operativos de búsqueda oficiales a gran escala.

De acuerdo con cifras divulgadas por la Secretaría de Gobernación de México, cientos de migrantes desaparecieron en el país durante 2024. En este contexto, las familias insisten en que se profundicen las investigaciones y se implementen mecanismos de rastreo que permitan avanzar en la localización del grupo desaparecido en Chiapas.

Fuente: El País

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