Durante el fin de semana, la Alta Cámara Masónica nombró como nuevo Gran Maestro de la Gran Logia de Cuba a Juan Alberto Kessel Linares.

En su sesión semestral, expulsaron al Gran Maestro, según confirmaron a CubaNet varias fuentes masónicas.

El citado medio refiere que Kessel Linares “es maestro titular de la Logia Pi Margall, de La Habana. También ha sido representante ante la Alta Cámara por más de 15 años; fungió como Gran Tesorero de la Gran Logia de Cuba, es Gran Maestro de Ceremonia de la Alta Cámara del Rito (Supremo Consejo del Grado 33 para la República de Cuba) y delegado provincial del Supremo Consejo. Fue candidato a Gran Maestro en el año 2022”.

Su nombramiento ocurrió después de “la expulsión del Gran Maestro, Mario Alberto Urquía Carreño, durante la sesión de la Alta Cámara desarrollada en el edificio de la Gran Logia de Cuba este domingo”.

“Fuera, ladrón, usurpador, sinvergüenza, traidor”, asegura la nota que gritaban algunos representantes de las más de 300 logias del país que negaron a Urquía Carreño la posibilidad de “abrir y presidir la sesión semestral”.

Según explican, “los masones se basaban en la ilegalidad con que desempeñaba su cargo el Gran Maestro desde que el pasado 25 de enero fuera expulsado por el Supremo Consejo” luego del robo de 19.000 dólares de la oficina del Gran Maestro.

“Depositamos un voto de confianza para que siga el proceso de esclarecimiento y total enjuiciamiento de todos los funcionarios incluyendo a los de la espúrea Corte de Justicia masónica y de los hermanos que apoyaron y permitieron que la constitucionalidad de la Gran Logia de Cuba estuviera en riesgo, (…) por ser los principales cómplices de tan aberrante proceder en los más de 164 años de masonería. Hágase la justicia”, dijo, por su parte, el masón Pompilio Portuondo en Facebook. 

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