La popular cantante cubana Malena Burke se define como una persona tranquila aunque todos crean que ella es "tremenda" por su desenvolvimiento en los escenarios.

La artista, hija de Elena Burke y madre de Lena -dos grandes voces de la cultura cubana- está ligada al arte desde que era una niña.

Todavía recuerda su casa en el Vedado, en La Habana, y todos los artistas que confluían allí. La primera vez que se presentó en público era apenas una adolescente. Después comenzó en Tropicana. "Fue una escuela para mi", asegura.

Luego de varias décadas fuera de Cuba -primero emigró a Venezuela y luego a Estados Unidos- Malena ha encontrado en el público de Miami una familia, personas que la quieren y la siguen incondicionalmente.

Tiene cuatro hijos y con cada uno de ellos una relación muy especial pero en Lena tiene también a una amiga, una compañera de escena. "Tenemos una relación muy fuerte, nos acompañamos y nos apoyamos en todo".

Desde hace varios años la artista se prsenta el último sábado de cada mes en el Real Café de Miami, un espacio que se ha convertido en su casa.

A Cuba ha regresado varias veces. La última vez fue a un homenaje que le hicieron a su madre en La Habana, luego de varios años de fallecida. Por ahora no piensa volver. "Las cosas están muy difíciles allá, las personas no pueden ser felicces viviendo como viven", dice, pero aclara que siente mucho cariño por el pueblo cubano.

La artista también habló de su religiosidad. Aunque es católica respeta todas las religiones y cuando sube a un escenario lo hace acompañada siempre de la Virgen de la Caridad del Cobre y de Santa Bárbara.

Según dice, a ella le encantan todos los géneros musicales. De hecho a veces ha rapeado versos en sus conciertos. También le gusta el género urbano, aunque no le interesse hacerlo.

"A mi me gusta Chocolate MC, me gusta mucho Bajanda y me gusta El Micha", comenta.

Malena reveló también que en su cartera lleva siempre consigo "un tesoro". Se trata de una foto de Celia Cruz y su madre Elena Burke. "Ellas son como mis ángeles de la guarda".

Para ella Celia es la artista cubana que más lejos ha llegado. "No hay otra igual", asegura.

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