Exboxeador cubano Mario Kindelán se sincera: No tenía prácticamente nada para comer
Redacción de CubitaNOW ~ lunes 11 de diciembre de 2023

El estelar campeón olímpico cubano Mario Kindelán se sinceró en una entrevista concedida a Play Off Magazine, donde contó dolorosas interioridades de su carrera y su posterior retiro del pugilismo.
Kindelán es hoy entrenador en Baréin, un trabajo que le llegó porque le iba a llegar, pues según asegura por muchos años el INDER le negó la oportunidad.
“Aquí llevaban más de siete años tratando de localizarme para que les trabajara como entrenador, y el INDER siempre les respondía que no estaba capacitado o en plenitud de formación para asistir a esos contratos. El INDER les preguntaba si querían a otro entrenador con experiencia, pero que yo no estaba localizable”, contó el exboxeador afirmando que su historia es la de casi una guerra contra los dirigentes deportivos de Cuba.
El púgil cubano admite que tiene una profunda devoción por Fidel Castro y es una de las razones por las que piensa regresar a Cuba, y por las que nunca aceptó abandonar una delegación cubana.
Según él, Castro siempre se preocupó por los deportistas y asegura que “todos los problemas” llegaron después de su muerte.
“El INDER a mí nunca me interesó en lo absoluto, jamás tuve que ver con ellos ni depender de ellos. Me veían como un estorbo, como un enemigo prácticamente, porque cuando yo necesitaba algo y que podía ver al presidente del INDER, iba directamente a Fidel, porque él me dio esa facultad”.
Para Kidelán sus mayores adversarios han estado en la isla: “así ha sido toda mi trayectoria prácticamente en el deporte. Mis peores enemigos, mis peores contrarios, los he tenido siempre en mi país, pero gracias a Dios siempre me he preparado muy bien para salir vencedor, y en esta no voy a salir como perdedor, al contrario, voy a salir dando un nocaut”.
El exatleta se refirió a la venta de algunos de los trofeos que ganó en su carrera: “De la venta de mi medalla olímpica de Sydney 2000 todavía no me arrepiento. La vendí porque me vi en una situación crítica. No tenía prácticamente nada para comer ni para mantener a mis hijas, y tuve problemas personales que me llevaron al divorcio. La vendí porque era mejor tener cuatro o cinco pesos para poder comer que desertar”.
El exboxeador asegura que muchos de sus premios fueron robados del Museo del INDER, de Holguín y nadie hizo nada por recuperarlos. Según trascendió en la entrevista ha podido recuperar por él mismo la mayoría de ellos. De hecho hace unos días acaparó titulares intentando vender otra medalla a un antiguo rival, que terminó regalándole el dinero para que la conservara.
Sobre su actual trabajo asegura que lo logró luego de que le contactaran por internet personalmente.