Yasma Guerrero, el actor que interpreta a Salvador en Asuntos Pendientes, reveló detalles de su carrera y de cómo había llegado al casting de la novela.

Según cuenta a la actriz Massiel Dueñas, en ese momento tenía trabajo pero aceptó el personaje porque el rodaje era de apenas un mes, lo que le daba tiempo.

Llegó al director Felo Ruiz, gracias a la recomendación de la actriz Flora Borrego, quien interpreta a Adriana, y de otros colegas.

Para él fue una experiencia muy bonita porque le tomó mucho cariño a Felo y al resto del equipo con el que compartió.

Guerrero se ha llevado una gran sorpresa al ver el cariño con el que han acogido a su personaje.

"La gente me ha recibido con más cariño del que imaginé. Como el personaje pasa por una relación complicada con Adriana pensé que sería diferente... En la calle me saludan todo tipo de personas. El otro día pasó por mi lado un camión con albañiles que me gritaban Salvador con una alegría tremenda", dice.

Yasma tiene una amplia trayectoria en el cine, el teatro y la televisión. Aunque estudió en un pre militar, siempre estuvo interesado en el arte. "No entré a la ENA porque no sabía cómo hacerlo", recuerda.

Su primera película es La noche de los inocentes, de Arturo Sotto. Luego ha trabajado en otros filmes como Buscando a Casal, de Jorge Luis Sánchez, e Inocencia, de Alejandro Gil. Con esta última obtuvo el premio Adolfo Llauradó de cine.

Hablando sobre el audiovisual cubano en general señaló que, en su opinión, uno de los puntos más débiles es el guion.

Guerrero asegura que no le importa trabajar gratis si tiene que hacerlo pero que nunca aceptaría un personaje con el que no se identifieque ni trabajaría con un director con el que no sienta algún tipo de empatía.

Sobre las condiciones de los rodajes en Cuba señaló que en muchos casos la alimentación es muy mala y las condiciones también. "A veces no tenemos ni donde orinar", explica.

Para ser feliz asegura que lo que más necesita es el amor y el cariño de las personas que quiere y al arte, algo que no le puede faltar. "Bueno la bebida también...", comenta entre risas.

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