El Congreso español ha aprobado una moción instando al gobierno de Pedro Sánchez a enviar leche en polvo a Cuba, ante la escasez que afecta a la isla. La iniciativa fue promovida por el grupo parlamentario Sumar y contó con un apoyo significativo: 33 votos a favor, ninguna oposición y tres abstenciones. La medida recibió el respaldo del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) y del Partido Popular (PP), evidenciando un raro consenso entre distintas fuerzas políticas.

La Proposición No de Ley (PNL), aunque no vinculante, solicita al Gobierno que destine fondos a la Agencia Española de Cooperación Internacional para reforzar los programas de ayuda alimentaria en Cuba, con un enfoque especial en la provisión de leche en polvo para la población infantil. Esta colaboración se propone en coordinación con el Programa Mundial de Alimentos (PMA) para asegurar una distribución eficiente y transparente.

El representante de Sumar, Raúl Valerio Morales, en defensa de la moción, atribuyó la crisis cubana principalmente al embargo de Estados Unidos, exonerando al régimen de La Habana de responsabilidad. En una postura similar, Alba Soldevilla del PSOE, señaló tanto al "bloqueo" como a los desastres naturales como causas principales de la situación alimentaria crítica en Cuba.

En contraste, Silvia Franco, portavoz del PP, expresó su solidaridad con los cubanos por la "crisis multisistémica grave" que padecen, pero también enfatizó la necesidad de que el gobierno cubano realice las reformas económicas necesarias. Franco hizo un llamado a asegurar un marco de absoluta transparencia en la distribución de las ayudas.

Desde una perspectiva más crítica, José Francisco Alcaraz de VOX, insistió en que los fondos destinados a Cuba deben ser vigilados de cerca para evitar fraudes y garantizar que lleguen íntegramente a la población necesitada. Alcaraz condenó la incapacidad del gobierno cubano para alimentar a su propia población infantil.

La PNL también insta a la creación de canales de suministro de leche en polvo que incluyan la colaboración de diversos ministerios, administraciones autonómicas y el sector industrial lácteo español. Esta iniciativa tiene como objetivo asegurar que los niños cubanos reciban este alimento esencial en medio de la crisis prolongada que atraviesa el país.

La Agencia Española de Cooperación Internacional aún no ha respondido sobre cómo planea implementar las recomendaciones aprobadas. Mientras tanto, en una reciente reunión en Antigua y Barbuda, el vicepresidente cubano Salvador Valdés Mesa reiteró ante Cindy McCain, directora del Programa Mundial de Alimentos, que el embargo estadounidense sigue siendo el principal obstáculo para la seguridad alimentaria en Cuba. McCain, por su parte, elogió los esfuerzos del gobierno cubano por garantizar la alimentación de su población, especialmente la de niños y jóvenes, a pesar de los desafíos significativos.

Esta iniciativa del Congreso español refleja una preocupación internacional por la situación en Cuba y un esfuerzo colectivo por ayudar a aliviar la crisis alimentaria que afecta a los más vulnerables en la isla. Con la colaboración de diferentes actores y una vigilancia adecuada, se espera que esta ayuda llegue a quienes más la necesitan, contribuyendo así a mitigar una parte de los graves problemas que enfrenta el país caribeño.

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