La enseñanza primaria en Ciego de Ávila muestra hoy un déficit con el regreso a las aulas de los alumnos, luego de la interrupción de clases por la pandemia del coronavirus que postergó el inicio del actual curso docente.  

Un reporte de la prensa oficialista local habla de los resultados a más de un año del regreso a las clases presenciales en el territorio, que llegó a ser epicentro de la enfermedad en los meses de julio y agosto de 2021.

Uno de los factores mencionados indirectamente por el periódico Invasor este sábado son las diferencias entre las “condiciones tecnológicas” de los estudiantes, las cuales permitieron a algunos tener acceso a información y materiales que otros no tuvieron.

Una docente con 34 años de experiencia, Lidia Mena Cabreales, calificó el curso como “sin precedentes” debido a sus particularidades. “El esfuerzo de los maestros ahora es tres veces mayor”, enfatizó. La enseñanza a distancia no tuvo el efecto esperado y muchos volvieron a las aulas con deficiencias. Por ejemplo, muchos niños no vieron las teleclases.

Meila Valero Pérez, metodóloga integral de la EP que atiende la asignatura de Lengua Española, explica que se realizó un diagnóstico inicial que “no consistió en hacerle una prueba escrita a los alumnos. Más bien evaluó todas las esferas, tanto la cognitiva como la emocional, pues hubo niños que se enfermaron, otros perdieron a familiares queridos, y todos, en general, estuvieron expuestos a mucho estrés, situaciones que también influyeron en el aprendizaje”.

Precisamente, Lengua Española es la asignatura con los resultados más bajos. Debido a las dificultades, incluso los directivos del sector decidieron aplicar “toda la flexibilidad posible” en el proceso evaluativo que, según un funcionario, “para nada significó aprobar sin saber, o no tener que estudiar”.

La Dirección Provincial de Educación reportó un total de 384 estudiantes desaprobados de segundo, cuarto, quinto y sexto grados y otros 353 sin objetivos vencidos de primer y tercer grados.

Menos de la mitad, obtuvo resultados de Excelente (E) y Muy Bien (MB) en los niveles de primero a cuarto grado, mientras que en quinto y sexto fueron el 57.04 % de los estudiantes con tales calificaciones.

Los problemas han sido identificados en habilidades como la producción y comprensión de textos, el cálculo y la lectura. La docente María Antonia señala que, a la altura del tercer grado, aún tiene escolares que le leen con pausas prolongadas en cada palabra y señala la sobreexposición a las pantallas durante el tiempo del confinamiento.

Otra profesora sitúa en la comprensión el punto flaco de sus alumnos, pues “tú les explicas y cuesta mucho trabajo que ellos entiendan a dónde quieres llegar. “Tienes que explicarlo más detalladamente, darle la vuelta, hasta hacerte comprender”, afirma.

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