Violento asalto en Santiago de Cuba deja dos heridos y revela red criminal en fuga
Redacción de CubitaNOW ~ lunes 1 de septiembre de 2025

Un nuevo y violento asalto ha conmocionado a los vecinos del Distrito José Martí, en Santiago de Cuba, dejando dos heridos con armas blancas y una banda delictiva prófuga. El hecho ocurrió este 1.º de septiembre a plena luz del día, cuando un grupo de individuos tendió una emboscada a dos compradores tras contactarlos a través de Facebook, ofreciéndoles la supuesta venta de 1 300 euros.
La operación, que parecía una simple transacción de divisas, terminó en agresión. Los atacantes despojaron a las víctimas de dinero, joyas y pertenencias. Uno de los compradores resultó con heridas leves, mientras el otro recibió una puñalada en la zona de las costillas. Hasta ahora, su estado de salud no ha sido confirmado oficialmente.
Uno de los agresores, identificado como Yurisander Arias Riviao, alias "Malvino", fue capturado por las propias víctimas, quienes lo transportaban en una carreta de caballo rumbo a la estación policial. Pero antes de llegar, un grupo de cómplices lo rescató a la fuerza, armados con machetes, cuchillos y palos, interceptando la carreta y logrando liberarlo.
Este episodio no ha dejado indiferente a nadie. En redes sociales, los comentarios se multiplican con la misma intensidad con la que crece la indignación. "Q no escampa, madre mía, es miseria humana, indigencia del alma. Más violencia y delincuencia cada día, y un sistema fallido que no hace nada por remediar este agujero negro que nos absorbe lentamente", escribió Yausmel Pérez, reflejando el sentir colectivo.
A su vez, Zoila Boudet, entre el sarcasmo y la rabia, opinó: “A ese ya le llegará su momento, tenían que haberlo entregado al caníbal del Salao, jjj”.
Los ciudadanos no solo cuestionan la violencia, sino también la aparente pasividad policial. “¿Y la policía qué hace? Ah, pero no salgas con un cartel o protestes, que aparecen 500 mil patrullas y hasta los boinas negras. ¡Qué pena!, la situación de Santiago de Cuba llora”, comentó Yaramid Gómez Caballero.
Opinión compartida por muchos, como Yamil Ríos, quien no dudó en señalar: “La policía está comiendo lo que pican los pollos. Después el sucio gobierno se ofende por un cartel anticomunista. Lo que hace falta aquí es un Bukele, que no solo meta en cintura a los delincuentes, sino también a los corruptos del gobierno que tienen a Cuba sometida en miseria y vandalismo”.
Shabela Cortés expuso otra arista del problema, esta vez en tono de denuncia legal: “Si matas a uno en defensa propia te juzgan, y mientras tanto los delincuentes, asesinos y pandilleros se multiplican por cien. Todos los días es lo mismo”.
Maricel Acosta fue más allá, insinuando una relación entre los criminales y la policía: “Los delincuentes hacen y deshacen a sus anchas. Cuando vienes a ver, muchos hasta trabajan con la policía. Por eso los meten presos y a los días los sueltan”.
El caso de “Malvino” no es aislado, ni nuevo y según Daylan DF Mulatik, los antecedentes abundan: “Espero que ya estén todos detenidos y que paguen, porque al final los sueltan y continúan en lo mismo. No es la primera vez”.
Alex Reyes también pidió un cambio profundo: “Este país necesita un cambio de sistema. Pero también necesita reeducar y eliminar a una pila de delincuentes que se organizan y actúan con total impunidad”.
El descontento va más allá del caso en sí. Muchos temen por sus familias. Rafael Elizaje fue tajante: “Hace falta que se equivoquen y se metan con alguien de mi familia. Yo sí sé dónde localizarlos a todos”. Otros, como Dianelis Rojas, identifican a los agresores como reincidentes: “Al final caíste, perro. Fui una víctima tuya. Pero te veré encerrado unos cuantos años. Que lo cojan ya”.
A todo esto se suma el miedo, la resignación y la desesperanza. “Esto parece una película, pero no lo es. Es la muestra de un país en ruinas y miserias”, escribió Inhiobis Alayo. “Dios nos salve… estamos perdidos”, agregó Dallami Labrada. “Ya es demasiado esto”, exclamó Noris Arias Ortiz. “Por Dios, esto nos deja sin palabras”, coincidió Marcia Ñabañino. “En serio, cuando pensé que ya lo había visto todo, sale esto. Dios mío, sin palabras de verdad”, expresó Yamila Jefferson.
La ausencia de justicia, el cansancio social y la falta de respuestas alimentan un sentimiento generalizado de desprotección. La ciudadanía exige algo más que comunicados. Pide acción, justicia real y un fin al caos que parece haberse normalizado. Mientras tanto, Santiago de Cuba permanece en vilo, atrapada entre el miedo a la delincuencia y la decepción frente a las instituciones.
Fuente: Yosmany Mayeta