El Condado, barrio muy popular de Santa Clara, bajo vigilancia conjunta del MININT y los CDR
Redacción de CubitaNOW ~ martes 15 de octubre de 2024
El Condado, una barriada marginal y necesitada de Santa Clara, cuna de muchos buenos peloteros, fue el escenario de un despliegue represivo que unió a oficiales del Ministerio del Interior y miembros de los llamados Comités de Defensa de la Revolución decididos a enviar un mensaje de fuerza ante la ola de violencia y delincuencia que azota el Consejo Popular Condado Sur.
“En El Condado de Santa Clara participamos en un ejercicio conjunto de vigilancia los CDR y el MININT. Unidos en la lucha contra quienes quieren vivir delinquiendo y ponen en peligro la tranquilidad de nuestras comunidades”, manifestó en sus redes sociales el coordinador nacional de los CDR, Gerardo Hernández Nordelo.
Con la presencia de altos oficiales de la Policía Nacional Revolucionaria y del MININT, además de un nutrido grupo de oficiales y agentes de estos cuerpos represivos en compañía de “cederistas”, el coordinador nacional de la “chivatería” vecinal hizo gala de la demostración de fuerza desplegada ante los pobladores de la humilde barriada.
El régimen totalitario teme a los cubanos que malviven en barriadas humildes y abandonadas a su suerte, en donde florecen las actividades delictivas y el descontento de la población. Los vecinos de El Condado en Santa Clara o de La Güinera en La Habana han sido protagonistas de sonadas manifestaciones de protesta. Durante la histórica jornada del 11 de julio de 2021 (11J), vecinos de El Condado salieron a manifestarse en las calles, exigiendo libertad y un cambio en la dirección del país.
En agosto de ese año, las autoridades de Santa Clara iniciaron un programa de intervención comunitaria en ese barrio, destinado a mejorar infraestructuras. Un reporte del Noticiero Nacional de Televisión indicó que se trataba de dar respuesta a “algunos de los 107 planteamientos o inconformidades populares que habían quedado detenidos en el tiempo”.
Entre los proyectos destacados por la propaganda oficialista se mencionaron la limpieza de fosas, la eliminación de salideros, la renovación de bodegas, consultorios médicos y edificios multifamiliares, así como de calles y viales en mal estado. Pasados unos meses, en diciembre, el gobernante cubano Miguel Díaz-Canel presumió del amplio apoyo popular a su proyecto de “continuidad” durante un recorrido por El Condado.
“Pensaron que nosotros no íbamos a sobrepasar la pandemia, que se iban a seguir agudizando los problemas con la población y que el pueblo iba a salir a la calle e iba a tumbar a la revolución, pero se equivocaron”, dijo el gobernante.
Sin embargo, la verdad es que la pobreza y la falta de oportunidades imperantes en El Condado han llevado a varios de sus vecinos más jóvenes a enrolarse como mercenarios en la invasión rusa de Ucrania. En junio de este año, se conocía de la muerte de Camilo Ochoa, un barbero de 34 años que trabajaba en el barrio, caído en la conflagración bélica entre rusos y ucranianos.
“Nunca logras tu sueño de regresar con dinero de la guerra. A todos los que conozco, que son muchos, los han matado poco antes de que termine su contrato”, dijo a Martí Noticias un amigo de la infancia de Ochoa.
“La miseria, el hambre y el trabajo que se está pasando en Cuba es lo que mueve a los cubanos a meterse en una guerra que no es la suya. Lo único que yo deseo es que Cuba vuelva a ser libre, que tenga alimentos y tenga corriente. Yo no deseo más nada que eso. Y que nadie más vuelva a pasar por lo que pasó mi hermano Camilo”, añadió.
En enero de 2022, el régimen cubano confirmó la muerte de un joven de 17 años baleado durante un altercado con la policía en El Condado. La prensa oficialista se volcó para crear una “matriz de opinión” en la cual encajar el asesinato de Zinadine Zidan Batista Álvarez, el adolescente de 17 años muerto por disparos de PNR como algo justo.
La respuesta a lo sucedido en aquel entonces en el Condado fue justificado por el medio oficialista Cubadebate al asegurar que “Lo que pasó en El Condado es pan de cada día en barrios de cualquier otro país de nuestro continente y del resto del mundo, pero especialmente en Estados Unidos, donde ha habido que lamentar verdaderas masacres con participación de la policía”.
Lo que no es "pan de cada día" en ningún lugar del mundo, sino evidencia de un fracaso de los gobernantes, es que el descontento y las necesidades de la población sean acalladas con un aparato represor como el que exhibió orgulloso Hernández Nordelo; descontento y necesidades que son acalladas por el propio presidente cuando asegura que "el pueblo pacíficamente puede protestar sin que haya ninguna represión como respuesta"