El gobierno de Estados Unidos anunció un incremento significativo en el monto ofrecido a los inmigrantes indocumentados que opten por regresar voluntariamente a sus países de origen antes del 31 de diciembre de 2025. La Secretaría de Seguridad Nacional (DHS), a través de su titular Kristi Noem, informó que el incentivo económico pasó de 1,000 a 3,000 dólares, además de cubrir el boleto aéreo de regreso.

El programa, gestionado mediante la aplicación CBP Home, busca facilitar la salida voluntaria de personas sin estatus legal en el país, ofreciendo un proceso gratuito que no requiere comparecer ante un juez migratorio. Asimismo, contempla la condonación de multas o sanciones civiles derivadas de permanecer en el país más allá del tiempo permitido por la ley.

Desde enero de 2025, cerca de 1.9 millones de personas han optado por la autodeportación, según datos oficiales. “Durante la temporada navideña, el contribuyente estadounidense triplica el incentivo para quienes decidan salir voluntariamente del país, ofreciendo un bono de $3,000, pero solo hasta finales de este año”, aseguró Noem. “Quienes se encuentran en el país sin estatus legal deberían aprovechar esta oportunidad”, agregó.

El DHS enfatizó que el registro a través de CBP Home debe realizarse antes del 31 de diciembre para recibir el beneficio. De no acogerse al programa, los migrantes podrían enfrentar arresto y deportación forzada, así como restricciones futuras para reingresar a Estados Unidos.

El aumento del incentivo coincide con un contexto de intensificación de medidas migratorias y despliegues de control fronterizo por parte de Estados Unidos, que han incluido operativos en el Caribe y el Pacífico contra buques vinculados al tráfico de petróleo y otras actividades ilícitas.

El programa de autodeportación refleja la estrategia del gobierno estadounidense de combinar incentivos económicos con advertencias legales para reducir la población de inmigrantes indocumentados de manera voluntaria. Autoridades destacan que esta vía es más rápida y menos costosa que los procedimientos judiciales tradicionales, y puede ser utilizada por cualquier persona que cumpla con los criterios establecidos sin riesgos adicionales si se realiza correctamente.

La medida también busca enviar un mensaje claro sobre la política migratoria del país, incentivando la salida voluntaria y regularizando parcialmente la situación de aquellos que, de no acogerse al programa, podrían enfrentar consecuencias más severas.

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