Ha pasado el primer impacto pero la noticia sigue traspasando el éter, se multiplica en las redes, hace eco en seguidores y detractores: un tercer intento de asesinato contra el expresidente Donald Trump fue frustrado por las autoridades de California en Coachella Valley mientras el exmandatario celebraba un mitin de campaña este sábado.

El sheriff del Condado de Riverside, Chad Bianco, informó que la policía arrestó a un hombre armado a una milla del evento, quien portaba una escopeta cargada, una pistola y un cargador de alta capacidad. El detenido, identificado como Vem Miller de 49 años, intentaba ingresar al evento con un pase VIP falso, lo que según el sheriff indicaba una “operación sofisticada”. “Los pases de entrada eran lo suficientemente diferentes como para causar alarma a los agentes”, explicó Bianco a los medios. Gracias a esta intervención, las autoridades creen que evitaron un nuevo intento de asesinato contra Trump.

Miller, residente de Las Vegas y vinculado a una organización antigubernamental de derecha, fue detenido sin incidentes. Según el informe oficial, portaba las armas de manera ilegal y fue arrestado por posesión de un arma de fuego cargada y de un cargador de alta capacidad. El incidente no afectó la seguridad del expresidente ni de los asistentes al mitin.

Este es el tercer intento de asesinato contra Trump en menos de tres meses. El primero ocurrió en julio, durante un mítin en Butler, Pensilvania, donde recibió un disparo en la oreja. El segundo, en septiembre, tuvo lugar en su club de golf en West Palm Beach, Florida, cuando un tiroteo sacudió el evento en el que participaba.

En este último caso, el sujeto arrestado, además de su historial delictivo, posee una maestría de la Universidad de California (UCLA) y en 2022 se postuló para la Asamblea del Estado de Nevada. En su último arresto, fue liberado tras pagar una fianza de $5,000 dólares.

Este incidente aumenta las preocupaciones de seguridad para el expresidente mientras avanza su campaña hacia las elecciones generales de noviembre de 2024, donde enfrentará a la vicepresidenta Kamala Harris. La retórica y las divisiones políticas han generado un entorno de creciente tensión, elevando los riesgos para los líderes en campaña.

El equipo de seguridad de Trump sigue trabajando en estrecha colaboración con las fuerzas del orden locales y federales para garantizar su seguridad en futuros eventos. Aunque los detalles sobre el tercer intento de asesinato continúan emergiendo, la rápida acción de la policía evitó lo que pudo haber sido una tragedia.

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