Un hombre fue detenido por la policía en la zona de Talla Piedra en La Habana tras robar un teléfono móvil a un menor de 15 años. El incidente ocurrió cuando la víctima caminaba por las calles de Arroyo, Cristina y Rastro, y fue interceptado por el ladrón, quien escapó rápidamente con el celular. El perfil oficialista de Javier Gutiérrez informó a través de Facebook que el detenido, identificado como Ronnie Torres, fue capturado gracias a la colaboración de vecinos y el uso de cámaras de seguridad.

“Pensó que por ser más fuerte iba a salirse con su plan, pero fue todo lo contrario”, señaló Gutiérrez en su publicación, presumiendo de la “rápida” actuación de las fuerzas del orden del régimen; sin embargo, la realidad es que en muchas ocasiones los ladrones no son capturados. La intervención policial permitió recuperar el teléfono robado, lo que representó un alivio para la víctima y su familia.

“El ladrón fue detenido por las autoridades en pocas horas gracias a vecinos y cámaras del lugar" El perfil vocero del régimen también hizo un llamado a la población a mantenerse alerta, especialmente al inicio del año, cuando suelen registrarse nuevos métodos de robo.

El aumento de los hechos violentos en Cuba, reconocido incluso por la dictadura, refleja claramente la profundización de la crisis económica que se ha agudizado en los últimos meses. Hace apenas unos días, una internauta solicitó ayuda para identificar a un ladrón que, aprovechando una bronca callejera en La Habana, robó un móvil en una vivienda mientras una cámara de seguridad captaba el acto.

Tania Vargas, la denunciante, compartió su indignación en el grupo de Facebook “Confituras en La Habana” y pidió la colaboración de los usuarios para identificar al ladrón. En diciembre último, un incidente con un carterista en un ómnibus del transporte público de La Habana terminó con la intervención de la Policía. Según el usuario de Facebook "Dany por siempre apparel", a un pasajero le robaron el celular y más de 2 mil pesos. Aunque en el video se escucha decir a la víctima que le llevaron 12,000.

El cubano Javier Bobadilla compartió recientemente un relato estremecedor que evidencia no solo el impacto de la delincuencia común sino también el preocupante estado de las instituciones de seguridad en Cuba. Tras ser asaltado en la madrugada, Bobadilla detalló no solo el robo de su teléfono, sino también su experiencia en la estación de policía.

De ese lugar describe las deplorables condiciones de la policía, incluyendo la falta de recursos, patrullas en mal estado y bajos salarios, lo que ha generado una ola de renuncias en las filas policiales. La delincuencia genera un clima de temor y desconfianza entre los ciudadanos, quienes a menudo deben actuar por su cuenta para protegerse y colaborar en la captura de delincuentes, debido a la ineficacia percibida de las fuerzas policiales.

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