Una jornada de oración se transformó en pesadilla este domingo en Lexington, Kentucky, cuando un hombre armado irrumpió en la Iglesia Bautista Richmond Road y abrió fuego contra los presentes.

El ataque dejó saldo de dos mujeres fallecidas, dos hombres heridos y el propio atacante, abatido por la policía. El incidente comenzó minutos antes, cuando un agente de la Policía Estatal intentó detener al sospechoso —identificado como Guy E. House— por una alerta vehicular.

Durante el procedimiento, el individuo disparó contra el oficial, hiriéndolo y posteriormente robó un automóvil con el que se dirigió hacia la iglesia. Allí, entró armado y desató el caos entre los feligreses.

"Las víctimas fatales son dos mujeres, de 72 y 32 años, quienes perdieron la vida en el lugar. Otros dos hombres también resultaron alcanzados por los disparos: uno se encuentra estable, mientras que el otro permanece en estado crítico bajo atención médica intensiva", informaron medios locales.

La rápida intervención policial evitó un derramamiento de sangre aún mayor. Los agentes lograron localizar al agresor dentro del templo y, tras un intercambio de disparos, lo abatieron en la escena.

La policía confirmó que el tiroteo no fue aleatorio y que el agresor podría haber tenido conexiones personales con algunas personas dentro de la iglesia, aunque no se han ofrecido más detalles al respecto.

Las redes sociales del atacante muestran un perfil con fuertes opiniones políticas. House había publicado mensajes críticos hacia Estados Unidos e Israel, y expresado apoyo a la causa palestina. Las autoridades investigan si sus posiciones ideológicas guardan alguna relación con el ataque, aunque hasta ahora no se ha confirmado ningún móvil oficial.

"Este ataque ha conmocionado profundamente a la comunidad de Lexington, especialmente a la congregación afectada, que se encontraba en medio de su servicio dominical cuando ocurrió el tiroteo."

Líderes religiosos y miembros de la comunidad han pedido oraciones por las víctimas y sus familias, al tiempo que expresan su dolor por el nivel de violencia que se ha instalado incluso en espacios de fe.

La Policía Estatal de Kentucky y el Departamento de Policía de Lexington continúan con la investigación del caso, tratando de reconstruir los pasos del agresor antes del tiroteo, así como los posibles vínculos personales o ideológicos que lo llevaron a cometer el ataque.

Fuente: Telemundo Noticias

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