Un grupo de doctores cubanos extrajo un clavo de un pulmón a un niño salvándole la vida, este sábado en la provincia de Holguín.

Los accidentes por broncoaspiración son comunes en niños pequeños. En la propia provincia de Holguín, durante 2023 los especialistas en Otorrinolaringología han tenido otros dos casos similares, curiosamente uno por mes “el primero fue un grano de maíz, en enero; el segundo un frijol, en febrero y ahora un clavo”.

Este último caso ocurrió en la noche del sábado 4 de marzo, la doctora Mavil Isabel Benítez Fernández, especialista de Segundo Grado en Otorrinolaringología dijo a la prensa local que fue una noche ardua para otorrinos, anestesistas y personal de salón de operaciones del hospital pediátrico Octavio de la Concepción de la Pedraja, de Holguín.

Todo comenzó con un llamado de alerta de que llegaría al centro médico un menor el cual había broncoaspirado un clavo accidentalmente, y lo tenía alojado en pulmón derecho.

El niño de tres años fue trasladado desde desde el municipio de Cueto bajo el diagnóstico de tener alojado un cuerpo extraño a nivel de bronquio tronco derecho.

“La comunicación llegó a la Guardia de Pediatría de nuestro hospital junto con el envío por WhatsApp de fotos de Rayos X de tórax hechas al menor allá en Cueto. El hecho indicaba la urgencia, por lo cual la residente de Otorrino nos avisa de inmediato a la doctora Antonia María Salermo Reyes, jefa provincial de la especialidad y a mí, que estaba en casa durmiendo, pues eran alrededor de las 11 de la noche”, explicó a Telecristal la especialista.

La Jefa provincial del Capítulo de Otorrino explicó también que en estos casos los especialistas son activados y se unen por la complejidad de la operación y actúan de conjunto.

 “Realizamos una broncoscopía exploradora, este es un proceder muy riesgoso, porque supone actuar con un broncoscopio rígido de 6,7 milímetros, que entra a través de la boca, pasa por la laringe, la tráquea y llega entonces al pulmón, hasta de donde se extrae el cuerpo extraño”, relató.

El procedimiento es invasivo y riesgoso: “el peligro va desde el desgarro de mucosa, sangramiento, perforación de tráquea y/o bronquios hasta el paro cardiorrespiratorio y la muerte del paciente, pero en este caso, afortunadamente, en 25 minutos se logró extraer el clavo, aunque el equipo médico retornó a su casa alrededor de las 5 de la mañana, luego de dejar al paciente estable en la Unidad de Cuidados Intensivos, donde se evalúa su posible alta hospitalaria”, comentó.

El reporte indicó además que con las doctoras Mavil y Antonia María, participaron, de manera directa, en este proceder los anestesiólogos Gonzalo Sergio Antas Monte y Leidis Ajo de los Reyes, y personal de apoyo.

La doctora Benítez Fernández alertó sobre la broncoaspiración de cuerpos extraños y precisó que “se produce en pacientes, cuyas manos ya tienen la función de “pinza digital” y pueden introducirse objetos en la boca, por eso es tan importante que un adulto siempre esté supervisando al niño, nunca deben jugar solos ni dejarles a su alcance objetos que puedan introducirse en la boca, nariz, oídos y etcétera”.

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