Disminuye la población de mulos en Granma por el hurto y sacrificio ilegal

Redacción de CubitaNOW ~ viernes 16 de agosto de 2024

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La provincia de Granma ha experimentado una reducción significativa en su población de mulos, con una disminución de 285 ejemplares en comparación con el año anterior. Este decrecimiento, especialmente notable en las zonas del Plan Turquino, ha sido impulsado principalmente por el robo y sacrificio ilegal de estos animales, una tendencia que se ha intensificado desde 2022.

Las muertes de mulos han alcanzado cifras preocupantes, debido no solo al hurto, sino también a su sobreexplotación. En muchas áreas, se ha observado que las arrias, en lugar de contar con cinco animales, se han reducido a solo tres, lo que refleja un manejo inadecuado tanto en la carga de trabajo como en la alimentación de estos animales. Estas prácticas han tenido un impacto negativo en la salud y longevidad de la población mular.

Las evaluaciones recientes muestran que los nacimientos han sido insuficientes, con solo 82 nuevos mulos registrados. Además, el número de patios donde se crían y mantienen estos animales ha disminuido en 26, y se han perdido 611 yeguas reproductoras. También se ha observado una reducción en los puntos de monta directa, lo que complica aún más la recuperación de la población mular.

Teresa Atencio Rosabal, especialista en la Delegación Provincial de Agricultura, subrayó la necesidad de un enfoque riguroso para revertir esta tendencia y proteger a la población de mulos. La continuidad de esta especie es vital para las plantaciones cafetaleras y otros sectores económicos que dependen de la fuerza de trabajo animal para mejorar la productividad y contribuir a la sustitución de importaciones y la exportación de productos.

Actualmente, Granma cuenta con más de cinco mil mulos, en su mayoría propiedad de pequeños agricultores. Sin embargo, la pérdida constante de estos animales amenaza no solo la tradición, sino también la economía de las zonas montañosas de la provincia. La preservación y correcta gestión de esta especie híbrida, resultado del cruce entre un burro y una yegua, es esencial para el futuro de la agricultura en la región.


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