La tensión entre la ciudadanía y las fuerzas de la Seguridad del Estado en Cuba volvió a encenderse luego que este fin de semana fuera denunciada la detención arbitraria de Esperanza Álvarez, hermana del preso político Amalio Álvarez, quien fue sacada de su vivienda sin previo aviso y trasladada directamente a la estación policial del Capri, en La Habana.

El hecho fue reportado inicialmente por ADN Cuba, generando una ola de preocupación y rechazo en redes sociales, donde activistas, familiares de presos y ciudadanos denunciaron el incremento de acciones represivas en la Isla.

Según las primeras informaciones, varios agentes llegaron a la vivienda de la mujer y, sin presentar documentos oficiales ni motivo claro, procedieron a llevársela. Testigos aseguran que la escena ocurrió de manera brusca, en presencia de vecinos, que quedaron atónitos ante la actuación policial.

La familia de Álvarez afirma no haber recibido información sobre el motivo de su detención ni el tiempo que permanecerá retenida, una práctica que se ha vuelto frecuente en casos relacionados con opositores y familiares de presos políticos.

Este tipo de arrestos, generalmente destinados a intimidar, buscan —según denuncian activistas— castigar a quienes continúan denunciando las condiciones de encarcelamiento de sus familiares o exigiendo justicia. La hermana había participado recientemente en publicaciones y reclamos sobre la situación de su hermano, lo que podría haber motivado la acción represiva.

Diversas organizaciones de derechos humanos están solicitando información inmediata sobre su paradero, su estado de salud y el motivo legal de su detención. Activistas dentro y fuera de Cuba señalan que el régimen continúa utilizando la figura del “arresto por prevención” para amedrentar a voces críticas, sin cumplir con procedimientos legales mínimos ni permitir acceso a abogados.

La noticia ha generado una fuerte reacción en redes sociales, donde numerosos usuarios piden su liberación y alertan sobre el creciente patrón de detenciones arbitrarias contra familiares de presos políticos.

Muchos usuarios condenan el abuso policial y denuncian que en Cuba “ya nadie está a salvo de la represión”. Otros internautas expresan apoyo a la familia y piden oración por Esperanza y su hermano.

Críticas al régimen, llamados a la comunidad internacional, experiencias personales se suman a la denuncia de ADN Cuba.

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