Cuatro trabajadores de la Aceitera “Alberto Álvarez” del municipio Regla, en La Habana, fueron detenidos el jueves por presuntamente robar productos de dicho centro.

Se trata de dos hombres y dos mujeres, quienes terminaron en la estación de la Policía del mismo municipio capitalino, informó la página de Mauro Torres, administrada por la Seguridad del Estado.

De acuerdo con de la misma, “los presuntos autores forzaron la cerca perimetral para desviar la mercancía y posteriormente revenderla a un elevado precio especulativo”.

“Durante un tiempo, miembros del Ministerio del Interior realizan operativos para atrapar de manera infraganti a los ladrones de la zona del puerto, sin embargo, a pesar de tener resultados positivos en sus acciones, aún persisten problemáticas en el control y la administración de las industrias de los alrededores”, agrega.

En otra información este viernes, la página asegura que en horas de la madrugada capturaron otro ciudadano que se encontraba robando aceite en la instalación de Regla.

“Para la comisión del delito, el detenido utilizaba un auto marca Chevrolet y extraía grandes cantidades de aceite mediante una abertura de la cerca perimetral. También se le ocuparon sacos de harina”, apunta. “La cantidad de aceite equivale a más de cien litros según el pesaje”, precisa.

En medio de la actual crisis y un creciente descontento popular, el gobierno cubano y sus aparatos propagandísticos han desplegado nuevamente una campaña contra los hechos delictivos, corrupción e ilegalidades.

La víspera, la policía cubana detuvo a más de 50 presuntos revendedores mediante un operativo en el barrio habanero conocido como "La Cuevita", del municipio San Miguel del Padrón, una de las más populares zonas del mercado negro en la capital de la isla.

Los detenidos tenían en oferta productos como picadillo, aceite, pollo, queso, galletas, medicamentos y artículos de aseo, según fuentes oficiales. El Gobierno de La Habana ordenó esta semana realizar múltiples operativos policiales contra cuentapropistas en varios capitalinos como Marianao, por "precios abusivos" en los mercados.

También recientemente, el gobernante Miguel Díaz-Canel dijo que no permitirá que los intermediarios se enriquezcan en la actual crisis económica, provocada en gran medida por la llamada Tarea Ordenamiento, que desató una inflación sin precedentes. Díaz-Canel advirtió que iniciaría una cruzada contra quienes él considera “ilegales, pillos, lumpen, vagos y corruptos en favor de nuestro pueblo y de la tranquilidad y el desarrollo honesto de nuestra sociedad”.

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