Derecha domina elecciones en Honduras: empate técnico deja fuera de juego a la candidata izquierdista
Redacción de CubitaNOW ~ lunes 1 de diciembre de 2025
Honduras vive uno de los procesos electorales más tensos de su historia reciente, marcado por un giro contundente hacia la derecha y por la eliminación total de cualquier posibilidad de retorno de la izquierda al poder. Con el 57% de las actas procesadas, el Consejo Nacional Electoral (CNE) confirmó un empate técnico entre los candidatos derechistas Nasry Asfura y Salvador Nasralla, dejando definitivamente fuera de competencia a la candidata de izquierda, quien no logró consolidar apoyo significativo en unos comicios donde el electorado mostró claramente su rechazo a ese sector político.
La presidenta del CNE, Ana Paola Hall, informó que Asfura lleva una ventaja mínima —apenas 515 votos— sobre Nasralla. Esta diferencia es tan estrecha que obliga ahora a pasar a un escrutinio manual, proceso que definirá quién será el próximo presidente de uno de los países más golpeados por la pobreza, la violencia y la migración.
La contienda electoral refleja un cambio profundo en la preferencia del electorado hondureño. La candidata de izquierda, que buscaba posicionarse como alternativa al desgaste social y económico, quedó muy por detrás desde las primeras actas, perdiendo toda posibilidad real de acceder a la presidencia. Su baja votación confirma lo que muchas encuestas anticipaban: el país ha dado la espalda a las propuestas de izquierda tras años de crisis, promesas incumplidas y cuestionamientos a los gobiernos de ese signo político en la región.
Este resultado no solo sella su derrota, sino que simboliza un desplome del proyecto político de izquierda en Honduras, en un momento donde, además, otras naciones latinoamericanas muestran cansancio frente a gobiernos progresistas que no han logrado responder a las demandas de seguridad, empleo y estabilidad.
Mientras tanto, los dos aspirantes derechistas se disputan voto a voto la presidencia. Nasry Asfura, empresario y exalcalde de Tegucigalpa, ha recibido un impulso adicional gracias al respaldo público del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, un hecho que agrega un matiz internacional al proceso. Por su parte, Salvador Nasralla, popular animador de televisión y figura mediática, sostiene que, según los sondeos finales de su partido, podría obtener 44,6% de los votos frente al 39,8% de Asfura, aunque subraya que aún no se declara ganador.
Ambos candidatos representan variantes dentro de la derecha, lo cual evidencia que el debate electoral en esta ocasión no gira entre modelos opuestos —derecha versus izquierda— sino entre diferentes estilos y propuestas dentro del mismo espectro ideológico. La ciudadanía, cansada de la inseguridad, la corrupción y el estancamiento económico, parece haber optado por un cambio claro de rumbo, excluyendo a la izquierda del mapa político inmediato.
El desenlace final dependerá del escrutinio manual que comenzará en las próximas horas. Sin embargo, lo que ya está definido es que Honduras vivirá un gobierno de derecha, y que la izquierda, profundamente debilitada, deberá replantear por completo su estrategia si aspira a recuperar relevancia en el escenario político nacional.