La aerolínea estadounidense Delta Air Lines anunció un recorte significativo en sus operaciones hacia Cuba para la temporada de invierno, reduciendo la mayoría de sus rutas directas desde Estados Unidos a la isla. A partir del 26 de noviembre, solo quedará disponible un vuelo diario entre Miami y La Habana.

De acuerdo con la información confirmada por la compañía, los vuelos entre Atlanta y La Habana quedarán suspendidos desde el 26 de octubre hasta el 28 de marzo de 2026. Mientras tanto, los dos vuelos diarios que cubren la ruta Miami-La Habana se mantendrán hasta el 26 de noviembre, fecha en la que pasará a operar únicamente una frecuencia diaria.

La aerolínea solicitó al Departamento de Transporte de EE.UU. una exención temporal para no perder los derechos de operación en esas rutas, solicitud que ya fue aprobada en agosto.

La reducción se produce en un contexto de baja rentabilidad y menor demanda de pasajes, agravado por las restricciones impuestas por la administración de Donald Trump sobre los viajes de estadounidenses a Cuba. A ello se suma la preferencia de muchos viajeros por destinos alternativos en la región, como República Dominicana, y el fin de la temporada alta de verano.

Un informe de Aviación Line señaló que la frecuencia de vuelos entre Estados Unidos y Cuba cayó un 21 % en comparación con 2024, con una proyección de solo 91 operaciones semanales en septiembre, lo que equivale a 13.965 asientos disponibles.

Aunque las suspensiones serán temporales, la compañía dejó abierta la posibilidad de restablecer las frecuencias si se produce una recuperación en la demanda o un cambio en las regulaciones. Delta había reanudado sus operaciones a Cuba en diciembre de 2016, después de más de cinco décadas de interrupción, pero desde entonces las variaciones en la política estadounidense han afectado la estabilidad de sus vuelos.

Delta no es la única aerolínea en ajustar sus operaciones hacia Cuba. United Airlines eliminó recientemente sus vuelos entre Houston y La Habana, mientras que Southwest redujo frecuencias en la ruta Tampa-La Habana. American Airlines, por su parte, también solicitó al Departamento de Transporte una exención temporal para reducir vuelos durante el invierno, especialmente en las rutas Miami-La Habana y Miami-Santiago de Cuba.

Estas medidas reflejan una tendencia general del sector aéreo en relación con la isla, marcada por la caída sostenida en la demanda y la falta de condiciones favorables para la rentabilidad.

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