Olivia Mínguez, de 25 años, vivió una experiencia insólita la madrugada del pasado lunes en Valencia, España: dio a luz en el salón de su domicilio sin haber sospechado en ningún momento que estaba embarazada. Según declaraciones de la joven a Europa Press, “no sabía nada, noté alguna molestia en la tripa, pero pensé que era algo que me sentaba mal”.

La madre primeriza relata que horas antes del parto trabajaba normalmente en un restaurante cercano. “Esa misma noche me sentía muy mal, con dolores. Le dije a mi padre que me llevara a urgencias, pero no dio tiempo”, explicó Olivia. Mientras esperaba ayuda en el salón, nació su hijo de manera espontánea, dejando a la familia sorprendida pero aliviada.

Su pareja, Aitor Chaves, compartió la experiencia: “Me dijo que tenía dolores y le dije de llamar a su padre para ir al hospital. Me tumbé otra vez y comencé a escucharla chillar y al bebé llorar. No me lo esperaba, me quedé en shock. Fue un momento bonito, estamos muy felices de que esté aquí”.

El parto requirió la intervención del Centro de Coordinación de Emergencias 112, que envió varias patrullas de la Policía Local. Los agentes asistieron a Olivia y al recién nacido, pinzando el cordón umbilical hasta la llegada del personal sanitario. Madre e hijo fueron trasladados al Hospital Clínico de Valencia, donde ambos recibieron atención médica inmediata. La joven recordó el traslado: “Vi muchas patrullas, dos ambulancias, me atendieron y me llevaron al peque”.

Olivia asegura que su embarazo pasó totalmente desapercibido. “Estaba de nueve meses, estaba hinchada, pero no tenía una barriga de decir ‘estás de nueve meses’. Nadie lo sabía”, añadió. La sorpresa se mantuvo hasta el momento del nacimiento, una situación poco común conocida como embarazo críptico, en la que la mujer no percibe señales evidentes de gestación hasta el parto.

A pesar del susto inicial, ambos progenitores destacan la eficiencia y rapidez de los servicios de emergencia. “Al minuto estaban aquí y me ayudaron en todo”, señaló Olivia, resaltando la profesionalidad del personal que asistió durante el parto inesperado.

Madre e hijo evolucionan favorablemente, y la familia celebra la llegada del nuevo miembro con entusiasmo, agradecida por la atención médica recibida y por haber superado un momento tan inesperado de manera segura.

Recomendado para ti