Los cubanos se quejan constantemente de la escasez de efectivo en los cajeros automáticos.

“En el Banco Metropolitano del FOCSA, una fila espera para extraer efectivo de los cajeros automáticos. Son las ocho y media de la mañana y aún no los han habilitado”, denunció este martes José A. Álvarez desde La Habana.

“Hasta ahí, bueno, está bien, estamos acostumbrados a todas las ineficiencias, pero es intolerable que un funcionario muy joven le diga a los ciudadanos que no tiene que darle explicaciones a nadie”.

“Pese a mi temperamento sosegado, exploto manifestando a voz en cuello que los funcionarios tienen la obligación de dar respuesta a los ciudadanos, pues éstos son el soberano. Yo no me conocía, me volví una furia gritándole al funcionario, quien no se detuvo a escucharme”.

“Luego cogí tribuna para recordarle a la cola que la (porquería de) Constitución le confiere la soberanía al pueblo. Alguien me dijo que eso era sólo en el papel. Está claro, sólo me reí”, agregó.

Varios cubanos lamentaron la escasez de efectivo en los cajeros automáticos y la falta de respeto del funcionario.

“El otro día no tenían dinero esos cajeros, ni el de Línea. Ayer (lunes) por la tarde en 23 y O tampoco tenían efectivo los cajeros. No es una explicación lo que necesitamos, por favor”.

“Si fuera en ese solo cajero no hay problemas, es que son todos los cajeros de la ciudad. Todo es cuento y mentiras y cuando vas a los banco solo tienen para darte billetes de a 5 o 10, imagínate saqué 10 000 pesos y me los dieron en billetes de a 5. Salí con un camión de dinero. Los billetes grande son para las MIPYMES, son la última moda”.

“Esas son las malas prácticas, ese es el bloqueo interno que nos está asfixiando más que el de Estados Unidos. Todos los que dirigen o están al frente de cualquier sitio, se siente dueño superior y su actuar, te guste o no, es solo manejo laboral, y quiénes lo sufrimos. Los Soberanos. ¿Hasta cuándo? Muy sencillo, hasta que lo sigamos permitiendo. No más maltratos por parte de funcionarios y otros trabajadores, sus funciones no son esas y el lugar no es de ellos”.

“Mire, no resolvió nada pero se desahogó y ya eso es algo. Así están todos los cajeros y ese de la foto por lo menos no tiene tantas personas, hay que ver el de Boyeros y el de Santiago, eso sí son colas y todos como carneros esperando: resignados, habituados. Es una pena ver cuánto puede llegar a soportar un ser humano”.

“Eso está pasando en todos los bancos. Ayer lunes marqué temprano en el Banco de 23 y 8, Vedado. Los cajeros, según la empleada, tenían problema y tenía que venir el técnico a ver qué pasaba. Todos si queríamos dinero había que hacer la cola para hacer nuestra gestión por caja. Tan sólo funcionaba una caja porque había poco personal, de vacaciones. ¡Había a la hora de abrir el Banco casi 40 personas!”, contó una cubana.

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