Yoan Enríquez, un padre cubano deportado en noviembre de 2023, ha regresado a Estados Unidos para reunirse con su esposa Melissa Vera y su hija de nueve meses en Tampa, según informa Telemundo 51.

"El primer día, ella me miraba como si pensara: lo conozco, pero nunca lo he tenido delante," compartió Yoan desde su hogar en Tampa. "Durante estos meses, nunca perdimos el contacto por videollamadas, pero lo que realmente necesitaba era estar con ella y verla crecer."

En 2020, Yoan cruzó ilegalmente la frontera sur de Estados Unidos. Fue detenido en un centro para migrantes durante varios meses y luego liberado con una orden de deportación, conocida como I220B, después de, supuestamente, haber perdido su entrevista de miedo creíble. "Como no sé inglés, ellos me dijeron: firma aquí, que esto es lo que dijiste en la entrevista de miedo creíble, y uno firma. Sin embargo, en esas supuestas declaraciones, hay cosas que nunca mencioné. Conozco a varias personas en situaciones similares," explicó Yoan.

Yoan se estableció en Estados Unidos y se presentaba anualmente ante las autoridades migratorias. Sin embargo, en noviembre de 2023, tras el restablecimiento de los vuelos de deportación entre el régimen cubano y la administración Biden, fue citado, detenido y deportado a Cuba. "Nos parecía increíble estar pasando por eso," expresó su esposa, Melissa Vera.

"No recuerdo un día en el que hubiese llorado tanto. Imagínate, regresar al mismo país del que saliste huyendo, porque allá te sentías preso. Fueron los meses más difíciles para mí," relató Yoan. Su abogado, Miguel Inda Romero, compartió el sentimiento: "Este fue un caso muy personal, porque Yoan no merecía regresar a Cuba. Yo crecí sin mi papá y no podía permitir que su niña pasara por lo mismo."

Determinado a reunirse con su familia, Yoan emprendió una nueva travesía desde La Habana hasta la frontera sur de Estados Unidos. Allí esperó durante dos meses por una cita con CBP One para que su caso fuera reevaluado. "Presentó más evidencias de sus problemas en Cuba con el régimen, donde los deportados no son recibidos como héroes, sino como traidores," argumentó Inda Romero.

Finalmente, Yoan recibió un parole, que, al año y un día, le permitirá aplicar a la Ley de Ajuste Cubano para obtener su residencia en Estados Unidos. "Esta vez no entró ilegalmente," subrayó su abogado.

El regreso de Yoan coincidió con una fecha muy especial: "Logré llegar el 12 de mayo, casualmente, el Día de las Madres. De verdad, fue el mejor regalo para mi esposa, para la niña y para mi mamá. Ahora, a empezar de nuevo."

"Casos como el de Yoan muestran la necesidad de comprensión y flexibilidad en las políticas migratorias," comentó Miguel Inda Romero. "Cada historia tiene sus particularidades y es crucial que las autoridades consideren estos matices. Su regreso no solo es una victoria personal, sino también un recordatorio de que las políticas migratorias afectan directamente la vida de las personas."

"Tengo muchas metas en este país que me ha dado una segunda oportunidad. Trabajaré duro para asegurarme de que nunca más tengamos que pasar por algo así," dijo el feliz padre.

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