Una cubana estalló después de que su hijo comprara unas uvas en una Tienda en Moneda Libremente Convertible (MLC) y estalló en las redes sociales.

Se trata de Alicia Yop, quien aseguró que no solo le faltó parte del producto que compró sino que, además, el pago no se realizó a la tienda, sino a un trabajador del local estatal.

“Y bueeehhhh... Comenzamos el 2024 con la pezuña izquierda... Sinceramente no esperaba que fuera diferente pues, objetivamente, absolutamente NADA ha cambiado. Así que... Ahí les va. Mi hijo encontró uvas en una tienda cercana a la casa llama ‘El Puente’, en Arroyo Arenas, La Lisa, así que me llamó a ver qué opinaba yo respecto a si debía comprarlas o no. En la tablilla expuesta al público decía: ‘uvas 1.7 kilos $11.95’. Me parecieron absurdamente caras, pero bueno, eran casi 2 kilos y podíamos considerarlo uno de esos lujazos del consumismo de fin de año, así que compro 2 paquetes de 1.7 kilos”, relató.

“Cuando llegó a la casa lo primero que hice fue pesarlas y, a que no adivinan. Un paquete tenía 1.3 kilos y el otro 1.2, así que entre los 2 paquetes nos estaban ROBANDO 900 gramos, casi 1 kilo, es decir, casi $10 MLC. El método de pago fue con transferencia, y así fue para todo el mundo xq, según ellos, en esa tienda no hay POS”, relató.

“Cuando le digo a mi hijo que me deje ver el sms emitido por el banco, me doy cuenta de que fue una transacción a una cuenta personal y no a una cuenta comercial, como debió haber sido si hubiera pagado usando el ‘Pago en Línea’, que es la vía habilitada para pagarle a los establecimientos comerciales a través de transferencia digital. Pues bueno, salgo rauda y veloz hacia la tienda, con hijo incorporado, a ver qué cuento era el que me iban a meter, echando cohetes por el del empingue”, indicó.

Según recuerda, “la tienda ya había cerrado pues eran como las 14:20, pero le pedí que me abriera. Cuando lo hicieron, les comenté lo del peso y me hicieron pasar, pero una vez adentro les dije: ‘lo que realmente me importa es saber de quién es la cuenta a la que mi hijo transfirió el pago de las uvas’. Al momento pelaron los ojos como si les fuera a echar gotas y señalaron a un trabajador q al mismo tiempo dijo: ‘mía’", señaló.

Por otro lado, afirmó que “para hacer el cuento corto, ellos alegaron que todo había sido por hacerle un favor a la población pues aún no estaban los códigos para la venta de las uvas y temían se echarán a perder (tan buenecitos ellos), a lo que yo les respondí que eso no se debía hacer y que, si les gustaba tanto quebrar las reglas y leyes, por qué no le bajan el precio a la comida de la tienda a la mitad y así ayudaban de verdad a la población... Pero bueno, esa idea si no les gustó, no sé por qué”, satirizó.

“Todos sabemos por qué faltaba casi 1 kilo de uvas, todos sabemos qué hacen con ellas y todos sabemos por qué están haciendo que la gente transfiera a una cuenta personal en lugar de a la cuenta comercial asignada a la tienda, solo que es competencia de otros probarlo y hacer cumplir la ley. Yo ofrezco todas las pruebas para quien las necesite”, denunció.

“Después de escuchar mi descarga, de chocar con mi empingue y mis advertencias de denuncia, les exigí me devolvieran mi dinero, a lo que, por supuesto, no pusieron la más mínima objeción. Disculpas para aquí, disculpas para allá, todos unos mansos corderitos... Y yo salí sin ni dar la vuelta”, comentó.

“Harta. Estoy harta de ir a una tienda y sentirme como si me metiera a la cueva de Ali Babá y sus 40 ladrones. Este robo descarado seguirá y seguirá porque nadie denuncia, nadie se devuelve a ponerlos en su sitio, nadie hace una denuncia formal en la Fiscalía General de la República de Cuba Fiscalía Provincial De La Habana como yo sí voy a hacer”, aseguró.

“No me roben más, repinga”, estalló.

Según detalló luego, su denuncia ya está surtiendo efectos.

“ACTUALIZACIÓN: Ya empiezan las consecuencias, y no precisamente para los ladrones... El perfil de #CadenaDeTiendasCARIBE me ha bloqueado en Facebook por mi denuncia de ayer... #SomosContinuidad... Y se rasgan las vestiduras compartiendo el discurso de Raúl... Cuánta hipocresía, cuánta demagogia, cuánta desidia”, concluyó.

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