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Cubana presuntamente atacada por Fernando Bécquer intentó denunciarlo pero la policía no aceptó la denuncia

Redacción de CubitaNOW ~ jueves 9 de diciembre de 2021

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Una caja de Pandora alrededor de la figura de un trovador cubano, y de la falta de una ley de género en Cuba, se ha destapado en el día de ayer cuando se publicó la denuncia de al menos cinco mujeres presuntamente acosadas por el artista Fernando Bécquer.

El artículo del medio El Estornudo: Cinco denuncias de abusos sexuales contra Fernando Bécquer, puso sobre el tapete una historia que al parecer varios artistas del mundo de la trova cubana dominaban pero que todo el mundo dejaba pasar.







Una de las preguntas frecuentes de los lectores, desde que salió el trabajo periodístico es por qué estas mujeres no denunciaron antes, o por qué no lo hacen ahora con las autoridades policiales.

Sobre lo anterior, una cubana reveló que ella sí fue a la policía a interponer su denuncia.

Massy Carram, explicó en Facebook que tras vivir esa horrible experiencia, cuando pensaba en poner un apartamento de la familia de Bécquer en un catálogo de rentas, ella misma se dirigió a una unidad de la policía a interponer su denuncia, pero como logró zafarse antes de que el trovador la tocara, el policía que la atendió le dejó claro que su denuncia no procedía, ni siquiera para levantar una investigación sobre ese hombre.




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A la par de esto, varios trovadores entre ellos Ray Fernández han salido en defensa del músico. Fernández incluso acusó de "sarta de faranduleros resentidos, de trovadictos frustrados, periodistuchos independientes, y señoritingas libidinosas", a quienes se han sumado a la denuncia del caso. Pero en sus propias defensas a Fernando Bécquer, otras mujeres han dejado denuncias muy graves.

Dhana Sant Val se identifica como peruana que en un viaje a la isla, fue víctima de ese hombre, y le escribe a Ray Fernández: "Así como te conocí a ti en 2012 y te tengo de contacto porque me gusta tu música y me caíste bien, tuve la mala suerte de conocer también a Fernando y ser una de sus víctimas.

Han pasado 9 años y no me animé a contarle a nadie el haber pasado por esto, porque me daba asco el solo recordarlo. Ahora que vi la nota, es que me animo a sacar a la luz también mi testimonio. Ha venido acompañado de un dolor de estómago y unas náuseas nefastas, el solo hecho de tener que traerlo al presente".





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