Los cubanos están temerosos ante la ola de robo y violencia en el país. Este miércoles, una ciudadana denunció el robo en su barrio en La Habana.

"En la madrugada trataron de romper el yale de la reja de la escalera de mi casa para llevársela, la casa esta ubicada en Arroyo Naranjo, bajando por la farmacia del policlínico de Mantilla", dijo Dailyn Álvarez en grupo de Facebook.

"Al parecer algo les impidió terminar su propósito. De igual manera venían por todo atlanta desde el banco haciendo lo mismo. Allá si pudieron llevarse una reja, un motor de agua a una vecina y unas casas después de la mía le hicieron lo mismo al yale".

"Los vecinos dicen son dos personas de color. Fue lo que se pudo ver. Con esto les comento que hay que tener mucho cuidado y estar atentos en esta zona y ver ya como rompen los yales. Ya las denuncias están hechas. Ojalá puedan ser capturados. También se está en espera de un vecino que tiene camara".

"Ay, mimi, en la escuela de mi niño que está en Ciudad Libertad, supuestamente entraron el fin de semana. Rompieron la puerta del aula y se llevaron los dos ventiladores y todos los tubos de luz. No sé si en más aulas hayan robado, no he tenido tiempo de ir a la escuela y averiguar bien, he estado ocupada buscando tubos de luz para que los niños no tengan que estar a oscuras dando clases. Ya esto es lo nunca visto, hasta las luces de un aula", dijo una cubana ante la denuncia.

Un sacerdote cubano denunció este martes que sus padres fueron víctimas de violencia con un machete en su propia casa en Santiago de Cuba.

Monseñor Dionisio García, arzobispo de Santiago de Cuba envió un mensaje tras el lamentable suceso.

"En la noche de hoy (martes), tres jóvenes armados con machetes, entraron en la casa de los padres del Padre Leandro, que viven en el reparto Santa María, y, al ser sorprendidos por la mamá del padre, la atacaron y le produjeron múltiples golpes. Al despertarse el padre y acudir en ayuda, lo atacan con machetes y le fracturan el cráneo. Los atacantes huyeron".

"Oremos para que Dios dé fortaleza a esta familia y sane al herido. Que la Virgen de la Caridad los cubra con su manto, sane al enfermo y les consuele con su amor de madre".

"Pidamos también a Dios para que esta escalada de violencia, y la difícil situación que estamos viviendo, se aparten de nuestro pueblo, que la vida honesta y segura que necesitamos y merecemos, se adueñe de nuestras ciudades y hogares".

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