Autoridades de la empresa estatal cubana CUPET aseguraron que quedó controlada completamente una fuga de combustible que afectó la Refinería Ñico López esta semana.

“La Refinería Ñico López se encuentra refinando desde el 22 de octubre de manera estable sin haber tenido presencia de olores fuertes en zonas de la capital. En el día de hoy 1 de noviembre de 2023 se ha percibido, en los municipios Regla y Plaza de la Revolución, un fuerte olor a nafta”, comienza explicando la nota de la mencionada entidad.

Según el comunicado: “En revisión de las posibles causas, se detectó un salidero en la línea de descarga de la bomba hacia el cargadero de Nafta Virgen Pesada que se retuvo en la zanja pluvial que se encuentra cerca del muro perimetral colindante a Regla, siendo esta la causa de la presencia de estos olores. Esta situación quedó solucionada con la eliminación del salidero”.

Los olores a combustible en la Ñico López son frecuentes. En septiembre pasado, hubo quejas por el fuerte olor a gas en La Habana, que fue atribuido precisamente a la puesta en marcha de la Refinería. En esa ocasión, la estatal Unión Cuba-Petróleo (CUPET) negó fugas y alegó que se debía a la actividad de la refinería después de un año sin funcionar.

“A partir de las referencias de olor a gas en repartos de la capital cubana, las empresas de CUPET, involucradas en las posibles emisiones, procedieron a iniciar las investigaciones para detectar las causas y encaminar acciones”, advirtieron en un extenso comunicado en esa fecha.

“Esta operación de la refinería, unida a la calma del aire que ha existido en los últimos días (sobre todo en horas de la madrugada y la mañana), ha ocasionado que los gases, producto de la combustión en la antorcha, generen los olores detectados en algunos repartos de La Habana”, dijeron.

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