Una noche larga y difícil se vivió en la zona industrial de Matanzas donde, continúan controlando el incendio de altas proporciones que destruyó varios kilómetros del lugar.

Tras una jornada de control del fuego en la noche del martes las llamas se avivaron en varias zonas por lo que fue necesario intensificar el bombeo de agua.

“Las llamas se avivan en la zona industrial de Matanzas. El humo vuelve a ser oscuro. El cambio en la dirección del viento genera una situación distinta. Chorros de agua ya son disparados hacia el incendio. Lo hacen con equipamiento traído de México y Venezuela cuya presión permite llevar el líquido hasta 150 metros de distancia”, escribió el reportero oficialista Lázaro Manuel Alonso con un video del hecho.

Esta mañana de martes, en un nuevo recorrido, la televisión estatal cubana, logró constatar que nuevamente el sitio luce sombrío pero con el fuego controlado.

Las imágenes muestran un considerable daño ecológico, que todavía no se determinado. Mientras a medida que el fuego cede, se intensifica la búsqueda de los restos de los jóvenes bomberos que fallecieron en la primera explosión.

Los cubanos esperan una investigación exhaustiva del incendio de grandes proporciones que dejó más de una decena de fallecidos y daños materiales y ecológicos por cientos de millones de dólares.

El socorrista emérito de Rusia y exjefe del Centro ruso de Preparación de Rescatistas, Alexandr Gofstein fue entrevistado por la revista oficialista rusa Sputnik  e indicó que la estructura de la Base de Supertanqueros de Matanzas, tiene evidentes fallas.

“Al construir semejantes bases de petróleo deben cumplirse determinados estándares, en particular, observarse la distancia mínima entre los reservorios y efectuarse su vallado, lo cual permite prevenir el derrame del combustible”, comenzó diciendo Gofstein.

El exjefe del Centro ruso de Preparación de Rescatistas alertó que “también se debe acondicionar las vías de acceso para los equipos de bomberos y montar los llamados 'tubos secos', no llenados de agua, destinados para enfriar los tanques de producirse un incendio, sin hablar ya de garantizar una segura protección contra los rayos”.

"El hecho de que el fuego se haya propagado de un reservorio a otros demuestra que había defectos en la estructura misma de la Base de petróleo, lo cual llevó a un desastre de tamaña proporción", indicó el exfuncionario del gobierno ruso.

El Ingeniero Hidráulico cubano Alejandro Alomá Barceló, especializado en sistemas contra incendios apoyó la tesis de que hubo fallas en el sistema contra incendios de los supertanques.

“Los tanques tenían un sistema contra incendio diseñado con altos estándares, incluso bajo normas norteamericanas. No funcionó de forma automática, según pude apreciar en algunas imágenes. Eso provocó que el incendio se saliera de control", explicó.

Por otro lado, comentó acerca del área de la piscina diseñada para posibles incendios. “Se trata de un área de contención alrededor de esos cuatro tanques para sí ocurría un derrame, el petróleo se quedara ahí y no comprometiera otras áreas de la instalación.”

En el siniestro cuatro de los ocho tanques de la Base de Supertanqueros de Matanzas quedaron reducidos a escombros, un panorama que a decir de los expertos en el sitio se complejizó debido a las altas temperaturas, el tamaño de los depósitos de combustible y las condiciones climatológicas, pues el viento también incidió en que se expandiera el fuego.

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