Continúa sin pistas la desaparición del recluta cubano Danniel Quesada Morales(actualización)
Redacción de CubitaNOW ~ viernes 14 de noviembre de 2025
La desaparición del joven recluta cubano Danniel Quesada Morales, de solo 19 años, mantiene en vilo a su familia desde el lunes, sin que hasta el momento existan pistas claras sobre su paradero.
El muchacho salió de su hogar en la comunidad de El Diamante de Santa Rita, provincia Granma, rumbo a la unidad militar de Aguas Claras en Holguín, pero nunca llegó. Su caso vuelve a colocar sobre la mesa la falta de mecanismos transparentes y eficientes en Cuba para enfrentar desapariciones, especialmente cuando involucran a jóvenes bajo el servicio militar.
La familia, sumida en la desesperación, denuncia que no cuenta con recursos para emprender una búsqueda más amplia por su cuenta. La comunicación también es limitada, lo que dificulta cualquier intento de coordinación entre vecinos, amistades o instituciones.
Si bien oficiales militares han visitado a los familiares, aún no existe una versión clara de lo ocurrido ni se ha informado sobre líneas de investigación concretas.
La preocupación aumenta por el historial reciente de casos similares en la Isla. En Cuba no existe un registro público de personas desaparecidas, como sí ocurre en otros países. Esto significa que cada caso se maneja de manera aislada, sin estadísticas oficiales que permitan medir la magnitud del problema ni identificar patrones. Las familias dependen exclusivamente de la voluntad —o falta de ella— de las autoridades locales.
La situación se agrava cuando la persona desaparecida es un recluta. En los últimos años se han reportado múltiples incidentes relacionados con el servicio militar: malos tratos, accidentes mortales, suicidios y desapariciones no esclarecidas, que terminan envueltos en silencio institucional.
Organizaciones y medios independientes han denunciado repetidamente que los jóvenes conscriptos se encuentran en una posición de vulnerabilidad extrema. Muchos cumplen el servicio de manera obligatoria, lejos de sus hogares y sin mecanismos externos que supervisen sus condiciones reales.
Mientras tanto, la familia de Danniel insiste en que el joven siempre avisaba al llegar a la unidad, algo que no ocurrió esta vez, lo que refuerza la sospecha de que algo grave pudo haber sucedido en el trayecto o a su llegada. Sin un protocolo transparente ni comunicación constante, el vacío informativo solo alimenta la angustia.
El caso de Danniel Quesada Morales no es aislado: cada año, múltiples familias cubanas atraviesan situaciones similares, ya sea por desapariciones dentro del país, por accidentes relacionados con el servicio militar o por el éxodo migratorio que se traga vidas enteras sin dejar rastro.
Hoy, la familia pide solo una cosa: que aparezca con vida. Y que, al menos una vez, el estado cubano y en este caso, las fuerzas armadas, actúen con la claridad y la urgencia que estos casos merecen.
Fuente: Martí Noticias