Contaminación mata en Moa: enfermedades respiratorias y cáncer arrasan mientras la industria del níquel no se detiene
Redacción de CubitaNOW ~ martes 8 de julio de 2025

La situación en el municipio de Moa, en la provincia de Holguín, se ha convertido en uno de los peores focos de contaminación ambiental en Cuba. Mientras el presidente Miguel Díaz-Canel denuncia la crisis ecológica mundial desde foros internacionales, dentro de su propio país, miles de personas viven sumidas en un infierno tóxico, ignorados por las autoridades.
La planta “Pedro Sotto Alba”, gestionada por Moa Nickel S.A. con capital canadiense, emite diariamente gases letales como dióxido de azufre, sulfuro de hidrógeno y amoníaco. Estos contaminantes no solo deterioran el medio ambiente, sino que han convertido a Moa en una zona de sacrificio humano.
"Los niños, los ancianos y los trabajadores viven envueltos en una nube invisible de enfermedad que los va apagando poco a poco. Más de la mitad de los habitantes padecen problemas respiratorios crónicos, mientras el cáncer de pulmón se vuelve una sentencia cada vez más común."
Las cifras son alarmantes: estudios en estaciones locales de monitoreo revelan concentraciones de gases que exceden por mucho los límites legales establecidos. Los síntomas respiratorios son parte del día a día para una población que ha sido obligada a adaptarse a la toxicidad como si fuera parte del clima. La bronconeumonía, las bronquiectasias y otras enfermedades pulmonares severas están haciendo estragos entre los moenses, en especial en los trabajadores expuestos sin protección adecuada.
"La situación es tan grave que incluso trabajadores de la planta enferman de tuberculosis y siguen laborando sin garantías, atrapados en un ciclo de enfermedad, pobreza y silencio institucional."
En redes sociales, figuras como Lara Crofs, Surima Sanregre y Rosa Mirtha han encendido las alarmas. Testimonios como el de Rosa, quien vivió frente a la planta Suchel en La Habana y recuerda escapes de amoníaco similares, demuestran que el problema va más allá de Moa.
El patrón se repite: contaminación extrema, ausencia de responsabilidad estatal y un pueblo que sufre sin justicia ni atención médica digna.

La comunidad ha comenzado a denunciar con urgencia: “¡Están enterrando ese pueblo en vida!” escribió Lara Crofs. Yamilen García, desde otro perfil, agregó: “Es monstruoso lo que están haciendo con esa gente”. A pesar del clamor popular, las autoridades siguen sin reaccionar.
El caso de Moa exige una respuesta inmediata. El pueblo cubano no puede seguir siendo víctima de una economía que antepone las divisas a la salud humana. Es hora de que la comunidad internacional escuche y actúe. Porque cada día que pasa, más cubanos se asfixian bajo una nube de indiferencia.