Este año, el gobierno cubano ha clausurado 15 micro, pequeñas y medianas empresas (MIPYMES) debido a irregularidades contables. Judith Navarro Ricardo, especialista jurídica de la Oficina Nacional de Administración Tributaria (ONAT), explicó que se identificaron prácticas contables inadecuadas, como la contabilización de compras de equipos como gastos directos en lugar de inventarios, lo cual reduce artificialmente las ganancias empresariales. Además, se encontraron problemas en los controles de registros primarios, como los estados financieros, que en muchos casos no existían o se ocultaban.

Navarro Ricardo indicó que, tras confirmar estas irregularidades, se ordenó el cierre temporal o definitivo de las empresas involucradas, dependiendo de la gravedad del incumplimiento. "Al cierre de mayo, hay 15 micro, pequeñas y medianas empresas en esta situación debido a irregularidades contables. Algunos de estos casos pueden derivar en delitos de evasión fiscal", declaró a Cubadebate.

Añadió que las MIPYMES que no lleven una contabilidad adecuada y no cumplan con sus obligaciones tributarias demuestran una intención de evasión fiscal, por lo que la ONAT tiene el derecho de proceder con denuncias formales.

En una reciente inspección a una MIPYME en La Habana, los inspectores revisaron el impuesto por la utilización de la fuerza de trabajo, calculado sobre el total de remuneraciones pagadas a los empleados con una tasa impositiva del 5%. La empresa no había incluido en el cálculo las bonificaciones pagadas a los trabajadores. Aunque se concluyó que el incumplimiento no fue intencional sino una mala interpretación de las normas, al dueño se le impuso un recargo y una multa.

La ONAT ha identificado varios modos de evasión fiscal en Cuba, como declarar y pagar menos de los ingresos reales obtenidos, omitir ingresos generados fuera del país y usar testaferros para ocultar la propiedad de varios negocios.

Belkis Pino Hernández, vicejefa primera de la ONAT, informó que entre el cierre de 2023 y mayo de 2024 se presentaron 210 denuncias por presunta evasión fiscal: 207 de personas naturales y tres de personas jurídicas. De estas, 30 expedientes se archivaron tras el pago de la deuda, 117 casos se formalizaron y 63 están pendientes. Pino Hernández expresó insatisfacción con la rapidez del proceso, ya que solo se han dictado seis sentencias firmes.

La situación de las MIPYMES en Cuba refleja desafíos significativos en la gestión contable y el cumplimiento tributario. Las irregularidades detectadas no solo impactan en la transparencia y legalidad de estas empresas, sino también en la recaudación fiscal del país. Es crucial fortalecer los mecanismos de control y educación contable para estas empresas, promoviendo una cultura de cumplimiento que permita su desarrollo sostenible y contribuya efectivamente a la economía nacional.

Además, el enfoque en la modernización y digitalización de los procesos contables podría facilitar el cumplimiento y reducir la carga administrativa tanto para las empresas como para las autoridades fiscales. La colaboración entre el sector público y privado es esencial para crear un entorno favorable que fomente la formalización y crecimiento de las MIPYMES en Cuba.

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