Durante el primer debate, los candidatos demócratas respondieron preguntas sobre emigración, economía, cobertura de salud, control de armas, derechos de minorías, cambio climático y sobre el juicio político a Donald Trump. Debido a la cantidad de candidatos presidenciales, el Partido Demócrata decidió organizar dos debates, con 10 rivales cada uno.

Este miércoles participaron en el Adrienne Arsht Center de la ciudad de Miami los senadores Cory Booker , Elizabeth Warren, y Amy Klobuchar, los representantes a la Cámara baja Tulsi Gabbard y Tim Ryan, los ex congresistas Beto O’Rourke y John Delaney, así como Julián Castro, exsecretario de Vivienda de Barack Obama (2009-2017, Jay Inslee, gobernador de Washington, y el alcalde de Nueva York, Bill de Blasio.

La senadora Warren afirmó que la economía va bien para aquellos que tienen dinero, mientras que O’Rourke apostó por una reforma fiscal equilibrada para todos los estadounidenses.

Sobre el seguro médico, Cory Booker expresó que debe ser un derecho de los estadounidenses. Por otro lado, Amy Klobuchar abogó por insistir con las farmacéuticas para que rebajen el precio de las medicinas.

Al responder sobre qué harían el primer día en la presidencia, muchos coincidieron en el apoyo inmediato a los migrantes. O’Rourke aseguró: “No habríamos devuelto a Óscar y Valeria”, refiriéndose al padre y a la niña de El Salvador que murieron cruzando el río Bravo.

Por su parte, Klobuchar enfatizó en la importancia que han tenido los inmigrantes en Estados Unidos: “Necesitamos trabajadores en nuestras factorías, que creen empresas, que tengan ideas”.

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