Un vuelo de la aerolínea española World2Fly con destino a Madrid fue cancelado el pasado viernes 22 de agosto luego de que su piloto y copiloto fueran víctimas de un asalto en La Habana Vieja, según informó el periodista de Univisión Javier Díaz. La aeronave debía despegar a las 8:50 pm, pero el ataque impidió la salida.

Durante la agresión, uno de los tripulantes —presuntamente el copiloto— resultó con una fractura en el cráneo. La aerolínea reubicó a los pasajeros en hoteles de la capital, entre ellos el Parque Central, aunque las quejas no tardaron en llegar. “Nos llevaron de un lado a otro, cansados, sin saber muy bien qué pasaba. Al final nos dieron hospedaje, pero la tensión ya estaba instalada”, relató un pasajero citado por Díaz.

Hasta ahora, ni World2Fly ni la prensa oficial cubana han emitido una confirmación sobre lo ocurrido, lo que no ha impedido que el hecho se sume a la creciente percepción de inseguridad en el país. Para muchos ciudadanos, la noticia no resulta sorprendente, ya que en redes sociales abundan las denuncias de violencia y delitos en las calles.

El más reciente informe del Observatorio Cubano de Auditoría Ciudadana (OCAC) reveló que la criminalidad alcanzó cifras récord en 2025, con 1.319 delitos registrados solo en el primer semestre, apenas dos casos menos que los reportados en todo 2024. El reporte también documenta al menos 99 asaltos y confirma que cuatro turistas extranjeros —procedentes de Rusia y Canadá, los principales mercados emisores hacia la Isla— han sido víctimas de hechos delictivos.

El incidente con la tripulación de World2Fly no solo afectó la programación de un vuelo internacional, sino que también reaviva el debate sobre la seguridad en Cuba, un tema que inquieta tanto a residentes como a visitantes.

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