Sin insumos, ni petróleo, la producción de tabaco en Cuba parece acercarse a su peor año, según reportes de la prensa estatal cubana.

Luego de una zafra azucarera catalogada como la peor en 100 años, los pronósticos de la tabacalera, otro renglón representativo de la agricultura de la isla, tampoco son positivos por el momento el beneficio correspondiente a la campaña 2021-2022 presenta atrasos “debido a múltiples factores”, señaló la prensa local.

Un artículo del diario de Pinar del Río, Guerrillero indica que hasta el pasado día 22 de julio se habían beneficiado en Pinar del Río 5000 toneladas, de 5945 disponibles,  esto debido principalmente al “déficit de diésel para acopiar la nueva cosecha y de falta de electricidad en las escogidas”. Un hecho que no augura nada bueno para la provincia más importante en la siembra de tabaco.

La situación no es nada halagüeña pues ya se había tenido que recuperar el 97% de las más de 400 toneladas de tabaco dañadas por las pasadas lluvias.

El coordinador de los programas de Tabaco en la provincia de Pinar, Pedro Rafael González Lorenzo, dijo que las empresas de Los Palacios, la “Hermanos Saíz” de San Juan y Martínez y ABT Pinar del Río están por debajo de la media y atribuyó el hecho a los constantes cortes eléctricos que sufre el país.

“Existen limitaciones por la energía, por humedad en la materia prima, déficit de mantas para el empaque y exceso de tabaco en rama en los depósitos y escogidas de las empresas, lo que afecta el flujo del beneficio. Todas deben incorporar de inmediato las fuerzas de trabajo que les falta y mejorar la productividad para que cumplan en la fecha planificada”, dijo González Lorenzo, que solo se refirió al aumento de fuerza de trabajo, no a cómo paliar la falta de insumos.

Aunque suene risible los sitios para beneficio del tabaco se encuentran deteriorados y sin materiales tan simples como puntillas para sus reparaciones.

“Con respecto a la construcción de aposentos, apuntó el funcionario que el plan anual se encuentra al 29 %, pues presentan atrasos, debido, fundamentalmente, a la falta de puntillas de cuatro pulgadas. En el caso de las reparaciones están al 50 % y acometen trabajos de restauración en 377 estructuras”, precisó el diario.

Sobre las anteriores deficiencias nada expuso la prensa estatal sobre cómo afrontarlas, en cambio señalaron que ya se prevé iniciar la siembra para la campaña 2022-2023, donde “la aspiración del grupo Tabacuba es finalizar la siembra en el mes de diciembre para aprovechar los beneficios del clima”.

Asimismo hablaron de aumentar el rendimiento en el campo aunque los sitios de beneficio no tengan solución en su deterioro, ni haya estrategias para el déficit de combustible.

“Se pretende como estrategia mantener las toneladas de producción creciendo en los rendimientos, lo que en definitiva propiciará un ahorro de insumos”, dijeron agregando que “fomentan la idea de llegar a 1.5 toneladas por hectárea, para ello realizarán una nueva contratación por parte de la empresa de forma directa con el productor y harán de igual manera con los proveedores de fertilizantes, pesticidas e insumos en aras de evitar atrasos”, en esas afirmación se obvian nuevamente los problemas en los sitios de beneficio donde ahora mismo se está acumulando el tabaco si procesar.

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