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¡Ver para creer! Lo que hace una profesora en un aula(video)

Redacción de CubitaNOW ~ martes 16 de septiembre de 2025

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La reciente respuesta de una profesora al video de Elieser El Bayardo ha generado una profunda reflexión sobre el papel de los educadores en sociedades represivas como la cubana. Minimizar la importancia de ciertos temas en la formación de los jóvenes no es solo una opinión personal; es una postura que puede tener graves consecuencias en una nación donde la libertad de expresión y el pensamiento crítico están restringidos.

En dictaduras como la cubana, la educación va mucho más allá de la simple transmisión de conocimientos. Los profesores deben convertirse en agentes de cambio, en modelos de ética, coherencia y resistencia.

Mientras el régimen busca moldear mentes dóciles a través de la censura y el adoctrinamiento, el educador tiene la responsabilidad de mantener viva la llama del pensamiento libre. Enseñar en este contexto no puede limitarse a seguir un currículo oficial o entretener a los estudiantes; debe ser un acto consciente de formación de ciudadanos críticos, capaces de cuestionar su realidad.

La profesora en cuestión, al restar importancia a los desafíos intelectuales que deben enfrentar los jóvenes, refuerza sin querer una cultura de conformismo y pasividad. No se trata de eliminar el entretenimiento o el disfrute en las aulas, pero en un sistema represivo, cada espacio educativo debe ser una oportunidad para fomentar la reflexión, la búsqueda de la verdad y el desarrollo del criterio propio.

Los educadores cubanos tienen una misión histórica: formar jóvenes que no solo sepan leer y escribir, sino que también sepan pensar, cuestionar y actuar con responsabilidad. Es vital que no se dejen llevar por el miedo o la comodidad de repetir lo que se espera de ellos. Un verdadero profesor, en una dictadura, es un pilar de la resistencia, una figura que inspira a los estudiantes a imaginar una sociedad diferente, más libre y justa.

Por eso, reducir la educación a la simple diversión es traicionar su esencia transformadora. La escuela debe ser un espacio donde se cultive la dignidad, la libertad y el pensamiento crítico. En tiempos de represión, enseñar bien es también un acto de valentía.



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