Economistas alertan sobre colapso cambiario en Cuba: “El país ya no tiene nada que ofrecer”
Redacción de CubitaNOW ~ martes 18 de noviembre de 2025
La dolarización ha fracturado profundamente a la sociedad cubana: de un lado, quienes tienen acceso a divisas; del otro, la mayoría que depende exclusivamente del salario en moneda nacional, cada vez más inútil frente a la inflación y los precios del mercado informal.
“Lo que es evidentemente claro es que no queda algo de lo que podríamos llamar postulados de la revolución”, dijo a Martí Noticias el historiador Manuel Cuesta Morúa, para quien la supuesta sociedad igualitaria quedó en el pasado. Lo que domina ahora, afirma, es el poder de la “redolarización”, justo cuando el régimen prometía —desde 2017 o 2018— avanzar en una “desdolarización” que nunca llegó. En su afán por captar divisas, el gobierno ha impulsado mercados solo en dólares y busca controlar, sin éxito, el sistema cambiario.
El economista Pavel Vidal, profesor de la Pontificia Universidad Javeriana de Cali, analizó el panorama en el laboratorio cívico Cuba X Cuba y advirtió que el gobierno pretende aplicar una tasa de cambio flotante, lo cual podría alterar aún más la dinámica del mercado. Según afirma, todavía está por verse si esta medida provocará una aceleración del tipo de cambio “hasta quinientos pesos por dólar” o si permitirá una ligera apreciación del peso.
Mientras tanto, las divisas continúan disparándose en el mercado informal, donde la demanda supera ampliamente la oferta. Sin capacidad para vender dólares de manera estable, el oficialismo culpa al portal El Toque y al gobierno estadounidense de manipular la tendencia, aunque la realidad económica apunta en otra dirección.
Para Mauricio de Miranda, economista y codirector de Cuba X Cuba, el problema es más estructural: el país “cada vez tiene menos que ofrecer”. Explica que el régimen presiona el mercado cambiario porque necesita divisas para comprar bienes que podrían —en un país funcional— producirse internamente. Pero el colapso del sistema productivo ha profundizado la dependencia de Cuba respecto al exterior: “Hoy depende mucho más que antes de los suministros procedentes del resto del mundo”.
En un análisis publicado en X, el economista Pedro Monreal recordó que la principal función del Banco Central de Cuba debería ser garantizar la estabilidad del peso mediante política monetaria seria, una tasa de cambio fundamentada y reservas internacionales suficientes. Si no cumple, advierte, el mercado informal “le quita la merienda”.
El deterioro es tal que el Estado cubano, con su aparato productivo prácticamente paralizado, debe importar casi toda la canasta básica que entrega mediante la libreta de racionamiento. Los efectos son devastadores: según estudios independientes, el 89 % de los cubanos vive hoy en pobreza extrema.
Mientras el gobierno insiste en culpar a terceros, la dolarización sigue avanzando, el peso se devalúa sin freno y millones de personas quedan atrapadas en un sistema donde producir es casi imposible y sobrevivir, cada día, más difícil.