El reguetonero cubano Bebeshito conmemoró este octubre su primer año en Estados Unidos, una fecha que aprovechó para hacer balance de su vida y carrera a través de una serie de publicaciones en Instagram. Aunque reconoció los múltiples logros alcanzados en solo 12 meses, también dejó ver el lado emocional de su proceso migratorio. “Hoy la vida me sonríe, pero nadie sabe lo que en verdad siente mi corazón”, confesó.

El artista, que pasó de ser estrella del reparto en Cuba a figura del género urbano en la diáspora, se mostró orgulloso del camino recorrido. “Con solo cuatro años de carrera en solitario llevo dos años, dos meses y diez días siendo el número uno de un país entero”, escribió.

Sus palabras encuentran respaldo en los números: ha cantado en un estadio, seis arenas y tres teatros en Estados Unidos, llevando el reparto a escenarios donde pocos imaginaban que podría llegar. “Liderando un género. Un reparto en estadio”, celebró. Una de las imágenes más simbólicas que compartió lo muestra ondeando una bandera cubana sobre el escenario ante una multitud eufórica.

Además de los conciertos, Bebeshito ha consolidado su presencia digital. Sus temas suman millones de reproducciones en Spotify y YouTube, y su comunidad en Instagram y TikTok crece de forma constante. Su propuesta, que fusiona el reparto clásico con elementos comerciales, le ha permitido ampliar su público sin perder la esencia de barrio que lo hizo popular.

Sin embargo, el camino también ha tenido costos emocionales. “A veces creo que me está cayendo el pelo del estrés”, dijo con humor, aunque reconociendo la presión, la distancia de sus seres queridos y el desgaste que implica crecer tan rápido en la industria. El recuerdo de su madre, Chavela Campo, fue uno de los momentos más emotivos de su mensaje: “Pero me falta algo. Nunca me había separado más de un mes de ella”.

El cantante también destacó el nacimiento de su hija, a quien llama “mi princesa hermosa”, como uno de los hitos más importantes de este primer año: “Hace un año conocí al amor de mi vida, mi princesa hermosa, mi hija. Pero dejé atrás a mi otro amor: mi mamá”.

Con colaboraciones, estrenos musicales y escenarios abarrotados en Florida y otras ciudades, Bebeshito asegura estar más enfocado que nunca. “Nada ni nadie va a impedir que yo logre lo que me propuse”, afirmó.

Hoy, con una carrera en ascenso y una familia que lo acompaña, el artista reafirma que su apuesta ha valido la pena. Aunque reconoce que aún le “falta algo”, su crecimiento en apenas un año en EE.UU. confirma que lo mejor de su trayectoria todavía está por escribirse.

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